La iglesia de la Merced, en el centro de Palma, se quedó pequeña anoche para acoger a las cientos de personas que acudieron al funeral en memoria de Luis Turrión, el joven de 25 años que falleció la semana pasada a causa de una avalancha de nieve en la Val d'Aran,. Entre los asistentes se encontraba la cúpula de la Guardia Civil de Balears, ya que el padre del joven fallecido es un agente de la Benemérita, muy apreciado en la Comandancia. Pero también representantes del mundo del deporte y en especial del rugby. Luis Turrión jugó durante varios años en el Mallorca Voltors.

El funeral en su memoria se celebró anoche a las ocho en la iglesia de la Merced, en la plaza de la Mercè de Palma. El templo quedó abarrotado y fueron decenas las personas que tuvieron que quedarse fuera. La ceremomia estuvo presidida por una gran foto del joven con ropa de esquiar.

En el acto intervinieron varios amigos y familiares, que no puieron contener la emociónal recordar al joven fallecido. Su padre, Antonio Turrión, le recordó como su mejor compañero de aventuras, que subió por primera vez al Galatzó con ocho años. "Siempre será nuestra montaña mágica", dijo. Antonio Turrión insistió en que esta no es una despedida. "Nos veremos en la montaña, Turri", finalizó.