La compra en 2017 de varias casas de lujo en el municipio de Calvià por parte de los representantes de futbolistas internacionales Fali Ramadani y Nikola Damjanac despertó las alarmas de la Agencia Tributaria. La adquisición se hizo a través de un complicado entramado societario para ocultar la identidad de los propietarios. El flujo de la información de la agencia fiscal a la Guardia Civil dio origen a la operación Lanigan, que ha concluido con la imputación de los dos intermediarios, dueños de una de las empresas de representación más importantes del mundo, por delitos de fraude fiscal y blanqueo de dinero.

Según informa la Guardia Civil, los investigados presuntamente utilizaban un club chipriota, el Apollon Limasol, para realizar fichajes ficticios. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil realizó un exhaustivo seguimiento internacional del dinero y lograron descubrir que estos agentes formaban parte de una organización criminal que era capaz de controlar diversos clubes de fútbol en países como Serbia, Chipre o Bélgica. Mediante estos fichajes fantasma obtenían grandes beneficios en perjuicio tanto de los clubes como de la hacienda del país por la evasión de impuestos. Estas actividades ilegales fueron denunciadas en las filtraciones denominadas Football Leaks, que provocaron un escándalo internacional.

Ramadani y Damjanac dirigen la empresa de representación de futbolistas internacionales Lian Sports, radicada en Malta. Sin embargo, los dos empresarios tendrían su domicilio oficial en Calvià. Por este motivo Mallorca se convirtió en el centro de una investigación que se ha extendido a toda España y que afecta a diversos clubes de fútbol de Primera División.

En los tres años que ha durado la investigación, los dos agentes de futbolistas habrían introducido en España una cantidad superior a los diez millones de euros, que habrían utilizado para adquirir viviendas, yates y mantener un elevado tren de vida. En la operativa de introducción de dinero en España ha jugado un papel fundamental un despacho de asesoramiento fiscal radicado en Malta y con delegaciones en otros países, cuyos trabajadores participarían en el ocultamiento y deslocalización fiscal de las inversiones, para evitar el pago de impuestos.

De momento en la operación Lanigan han declarado como investigados cinco personas, incluido Ramadani, cuya casa fue sometida a un registro la pasada semana. También se ha interrogado a decenas de testigos, entre ellos Maheta Molango, exdirector general del Real Mallorca.

La investigación se ha extendido a Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, Almería , Valencia, Asturias, Guipúzcoa, Vitoria y Pontevedra. Las pesquisas han sido dirigidas por el juzgado de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, y coordinadas por la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada. Se han autorizado registros en domicilios y sedes de empresas y se han tramitado medio centenar de requerimientos de documentación a clubes de fútbol y bufetes de abogados.

Real Mallorca

La Guardia Civil ha remitido once requerimientos de información a clubes de fútbol españoles, entre ellos el Real Mallorca, por fichajes relacionados con la agencia de los investigados Ramadani y Damjanac. La investigación se refiere a los fichajes de Zdjelar (Mallorca), Jovic (Real Madrid), Kalinic y Savic (Atlético de Madrid), Seferovic (Real Sociedad), Jovetic y Konoplyanka (Sevilla), Musonda (Betis), Radoja (Celta), Coric (Almería), Scepovic (Sporting de Gijón) y Sadiku (Málaga y Levante). Fuentes de la investigación precisan que los jugadores no están imputados, ya que las pesquisas se centran en los representantes.