Un hombre de 70 años fue condenado ayer a pagar una multa de 540 euros por acosar durante más de un año a una mujer a la que conoció en un gimnasio de Palma y que se negó a tener una relación con él. El acusado reconoció que siguió y vigiló a la víctima tanto en su casa como en su lugar de trabajo y se declaró autor de un delito leve de coacciones tras alcanzar un acuerdo con la fiscalía. Ante la conformidad de las partes, la jueza dictó sentencia.

El procesado y la denunciante se conocieron en marzo de 2017. Cuando él le regaló un perfume y una camiseta, ella le dejó claro que no quería ninguna relación. Tras este rechazo, el hombre acudió dos veces al domicilio de la mujer, que optó por bloquearlo en Facebook y WhatsApp para que no se pudiera comunicar con ella.

Sin embargo, el acusado utilizó el teléfono de un amigo para enviarle una felicitación y empezó a acudir con frecuencia a la vivienda y el lugar de trabajo de la víctima, que se sentía vigilada, angustiada y atemorizada. En agosto de 2018 llegó a seguirla con su coche y le hizo varias fotografías, tras lo que ella presentó una denuncia y un juzgado de Palma dictó una orden de alejamiento.