Una acusada de 49 años fue juzgada ayer en Palma por tener sexo con un menor de 16 años en un bar de la ciudad y luego darle 20 euros en septiembre de 2017. La fiscal solicitó para la sospechosa, una transexual, una pena de dos años de prisión y una orden de alejamiento por un delito de prostitución y corrupción de menores. En cambio, el abogado defensor reclamó la libre absolución o, alternativamente, una condena mínima de tres meses de cárcel.

La encausada se acogió a su derecho a no declarar y tampoco hizo uso del turno de la última palabra. Mientras, el perjudicado confirmó que tuvo relaciones sexuales completas en el baño y en la cama en la parte trasera del establecimiento cerca de la plaza de las Columnas, en Palma, con esta persona. "Yo no sabía nada de que fuera transexual", aseguró. Según su versión, estaba oscuro y todo fue muy rápido, por lo que no supo si era un hombre o una mujer. La fiscalía detalló en sus informes que al principio el adolescente, de 16 años, pensó que se trataba de una mujer, pero luego se enteró de que era un hombre. Ambos mantuvieron una única relación sexual consentida y luego la sospechosa le entregó 20 euros.

Algo similar ocurrió otro día con otro menor, de la misma edad, que tuvo sexo completo a cambio de cinco euros para tabaco. Este caso se sigue en otro procedimiento. El joven declaró ayer como testigo en el juicio y recordó que mantuvo relaciones sexuales en el bar en las inmediaciones de la plaza de las Columnas porque no supo decir que no. "Tuve miedo, me sentí intimidado", ha indicado. "Me dio cinco euros para un paquete de tabaco", añadió.

El testigo explicó que en septiembre de 2017 acudió al establecimiento junto con el otro menor. "Yo estaba en una mesa, vi que se pusieron a hablar y luego se metieron adentro. Salí a fumar un cigarro y me quedé allí. Tenía mis dudas de que era una transexual. No le dije nada a mi amigo. Luego le dije que fuera con cuidado, yo tenía mis dudas, pero el chiquillo es libre de hacer lo que quiera", manifestó. Según su versión, ese día él no tuvo relaciones con otra persona. "Mi amigo entró voluntariamente a mantener relaciones sexuales. Luego, él me dijo que había tenido relaciones", ha apuntado.

El joven relató que él tenía 16 o 17 años cuando tuvo sexo con la acusada en otra ocasión. "Yo sabía que le gustaban los chicos menores", subrayó.

El testigo reconoció que luego averiguó que se trataba de un hombre cuando unos conocidos de su padre se lo dijeron.

Una técnica del Consell de Mallorca que valoró a la víctima ha declarado que el adolescente tenía vergüenza al relatar los hechos. "No tenía consciencia del riesgo al que se había expuesto él mismo. No le daba importancia. Describió detalles que se ajustan a una situación de prostitución. El hecho de ser transexual no condicionó su relato", explicó la especialista.

La madre del afectado coincidió en que al principio su hijo no lo vio como un abuso. "Él no lo veía así", indicó, al tiempo que negó que le hubieran quedado secuelas. El caso quedó visto para sentencia ayer por la mañana en la sede de Vía Alemania.