La Policía Nacional detuvo en Palma a un masajista de 76 años acusado de abusar sexualmente de una clienta. La víctima habría sufrido tocamientos en sus zonas íntimas y otro tipo de prácticas sexuales que, según la investigación, nada tenían que ver con el tratamiento que precisaba. El sospechoso ha quedado en libertad tras ser puesto esta mañana a disposición del juzgado de guardia.

Los hechos, según explicaron fuentes policiales, habrían ocurrido en la consulta donde el acusado ofrece sesiones de quiropráctica, un método para curar dolencias óseas y musculares tratando la columna vertebral. La víctima padecía una contractura cervical y a finales de septiembre contactó con el hombre para que la atendiera. También el novio de la chica decidió ponerse en manos del masajista al sufrir una dolencia similar.

La mujer acudió por primera vez a la consulta el pasado 26 de septiembre. En esta primera sesión, siempre según el relato de la perjudicada, ya detectó algunos comportamientos anómalos. El hombre frotó sus genitales con varias partes del cuerpo de la mujer y la manoseó en sus zonas íntimas, asegurando que estos tocamientos eran parte del tratamiento necesario.

A pesar de ello, la víctima acudió a una nueva cita el 1 de octubre, ya que había notado cierta mejoría de sus dolores cervicales.

En esta segunda sesión, el acusado habría ido más lejos. El hombre hizo que la mujer se desnudara completamente y volvió a someterla a tocamientos. La joven relató que incluso cuando ella tuvo que ir al baño, él la acompañó con la excusa de comprobar si padecía alguna infección. La clienta acabó confirmando sus sospechas cuando el acusado le propuso una práctica sexual, asegurando que formaba parte del tratamiento, pero que ella consideró denigrante.

La víctima decidió acudir entonces a la Policía para presentar una denuncia por lo ocurrido. En su declaración, relató los tocamientos padecidos en la consulta del masajista y mostró su extrañeza por el hecho de que mientras las sesiones con su pareja apenas duraban 45 minutos, el quiropráctico se explayaba con ella durante dos horas por el mismo precio, según señalaron las mismas fuentes.

El caso quedó en manos de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional. Los agentes pusieron en marcha una investigación y el pasado miércoles arrestaron al acusado, un hombre extranjero de 76 años nacionalizado español, como presunto autor de un delito de abusos sexuales.

Los investigadores sostienen que los tocamientos y las prácticas llevadas a cabo por el acusado con la víctima no tienen ninguna relación con el tratamiento para la contractura cervical.

El sospechoso fue interrogado en comisaría sobre la denuncia de la víctima y ayer por la mañana fue trasladado por la Policía a Vía Alemania, donde fue puesto a disposición del juzgado de instrucción número 2 de Palma. La magistrada acordó su puesta en libertad a la espera de juicio.