Una mujer mallorquina de 44 años sufrió ayer heridas de extrema gravedad al ser atacada a martillazos por su marido en su domicilio de Campos. La víctima recibió numerosos golpes en la cabeza y el pecho y su estado era crítico. El agresor, un cubano de 50 años identificado como Juan P.R., fue detenido después de que él mismo avisara de lo ocurrido. La pareja tiene dos hijos de corta edad en común a los que, junto al resto de familiares, se prestó asistencia psicológica. La Policía Judicial de la Guardia Civil inspeccionó durante horas la vivienda donde ocurrieron los hechos para recopilar pruebas. El hombre permanecía anoche en el cuartel del instituto armado, acusado inicialmente de un delito de intento de homicidio, a la espera de ser interrogado sobre lo ocurrido.

Los hechos ocurrieron hacia la una de la tarde, según explicaron fuentes policiales. El sospechoso paró en una calle a una patrulla de la Policía Local de Campos. Dijo a los agentes que se dirigía al cuartel de la Guardia Civil para confesar que había agredido a su pareja durante una discusión en su vivienda. Los policías lo retuvieron y acudieron al domicilio, un piso situado en el número 30 de la calle Escorial. Allí encontraron a la mujer, inconsciente, sobre un charco de sangre y con heridas muy graves en la cabeza.

Una UVI móvil del IB-Salut se desplazó rápidamente al inmueble. Los efectivos sanitarios comprobaron que la víctima, de 44 años, presentaba gravísimas lesiones en el cráneo y había recibido también fuertes golpes en el pecho. La mujer se debatía entre la vida y la muerte y fue asistida durante más de una hora en el lugar de los hechos. Fue trasladada urgentemente en ambulancia a Son Espases. Fuentes del centro informaron por la tarde que la víctima permanecía ingresada en la UCI y su estado era crítico.

La investigación de esta agresión machista quedó en manos de la Guardia Civil. Agentes de la Policía Judicial y del Servicio de Criminalística examinaron durante horas la vivienda para recopilar pruebas y tratar de reconstruir lo ocurrido. Los investigadores, que acordonaron la calle, recogieron diversas muestras que serán analizadas en los próximos días. También tienen previsto tomar declaración al entorno de la pareja.

Los servicios sociales se movilizaron para atender a sus dos hijos, de cinco y ocho años, que no estaban en la vivienda cuando ocurrieron los hechos. Además, tanto los pequeños como el resto de allegados a la pareja contaron con asistencia psicológica. El hombre tiene además otros dos hijos, ya mayores de edad, fruto de una relación anterior.

Altercado con la Policía

Juan P.R. quedó detenido como presunto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa. Anoche permanecía en el cuartel de la Guardia Civil de Campos, donde los investigadores tienen previsto tomarle declaración en las próximas horas, para ponerlo después a disposición judicial. Según las primeras explicaciones que ofreció, la agresión se produjo durante una discusión con la víctima.

El hombre había protagonizado ya algún altercado en la localidad. Fuentes policiales explicaron que hace unos años deambuló desnudo por varias calles, lanzó objetos por la terraza de su domicilio y se enfrentó a varios agentes de la Policía Local de Campos, hechos por los que llegó a ser condenado.

Condena unánime

La condena de la agresión machista ocurrida ayer en Campos fue unánime entre las principales instituciones de las islas. Bajo la etiqueta #AturemViolènciesMasclistes, la conselleria de Presidencia, Cultura e Igualdad y el Instituto Balear de la Mujer (IBDona) condenaron la agresión en la red social Twitter.

Por su parte, el Consell de Mallorca reafirmó su compromiso contra la violencia machista. Balears continúa siendo la comunidad autónoma con más casos de violencia de género, con una tasa de 23,2 víctimas de agresiones machistas por cada 10.000 mujeres en el primer trimestre de 2019, según el Consejo General del Poder Judicial. Un total de 33 mujeres han sido asesinadas por violencia machista en Balears desde 2003, según recoge el informe sobre las mil mujeres que han perdido la vida a manos de sus parejas en España en los últimos 16 años. Sacramento Roca figura como la última víctima contabilizada en Balears.