Una jueza de Palma ha condenado a dos jóvenes mallorquines por quebrantar una orden judicial que les prohibía vivir en la isla. Los acusados, con numerosos antecedentes, incumplieron una medida cautelar de destierro tras ser detenidos por cometer robos en Magaluf. Fueron arrestados otra vez 16 días después en plenas fiestas del Much, en Sineu. La magistrada les declara autores de un delito de quebrantamiento y les impone sendas multas de 5.400 euros. En la sentencia descarta que tuvieran problemas económicos para marcharse, como alegaron, sino que "no tenían ninguna intención" de hacerlo.

Los dos condenados, de 26 y 29 años y representados por el letrado Miquel Àngel Ordinas, fueron detenidos este verano por la Guardia Civil como presuntos autores de varios hurtos en la zona de Magaluf (Calvià). El pasado 27 de julio, el juzgado de instrucción número 11 de Palma los dejó en libertad pero como medida cautelar los desterró. El magistrado dictó un auto en el que les prohibía seguir residiendo en la isla mientras durara la tramitación de la causa y les dio un plazo de 24 horas para irse.

Ninguno de los dos cumplió con esta orden. La Guardia Civil los localizó 16 días después, el 12 de agosto, en la plaza de Sineu durante la fiesta del Much, y los detuvo, según declara probado la magistrada del juzgado de lo penal número 4 de Palma.

Uno de los acusados alegó durante el juicio que no tenía dinero suficiente y carecía de DNI para abandonar Mallorca y cumplir la orden judicial. Sin embargo, la jueza no da ningún crédito a estas excusas. Apunta que el joven había trabajado hasta junio y que para este proceso judicial ha contratado a un abogado y un procurador, hecho que "evidencia recursos económicos". Además, resalta que no consta que le robaran o perdiera el DNI ni ha justificado por qué no se lo renovó. También destaca que permanecieron 16 días en Mallorca pese a la prohibición, sin haber reservado plaza en aviones o barcos para irse. El otro sospechoso no acudió al juicio.

La sentencia considera que los dos jóvenes actuaron con "nulo respeto por las decisiones judiciales" y ha quedado acreditada "su jactancia en quebrantarlas". Con todo, declara a los acusados autores de un delito de quebrantamiento de medida cautelar y les impone sendas multas de 5.400 euros, como solicitó la fiscalía en sus conclusiones.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Juicio por incumplir una orden que les prohibía vivir en Mallorca

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO