Un coche ardió ayer de madrugada después de que el conductor, que circulaba en estado ebrio, se estrellara contra una farola en la calle Joan Miró, en la zona de Gomila, en Palma. Los bomberos sofocaron las llamas en el automóvil y la Policía Local cortó la calle para facilitar los trabajos de extinción. El conductor fue imputado por un delito contra la seguridad vial tras dar positivo en la prueba de alcoholemia.

Los hechos ocurrieron a las seis de la madrugada frente al número 154 de la calle Joan Miró, según explicaron fuentes de los servicios de emergencias. El conductor, que circulaba en dirección al centro de la ciudad, perdió el control del coche, que se subió a la acera y acabó estrellándose contra una farola. El vehículo quedó envuelto en llamas tras la colisión. El conductor logró salir por su propio pie y resultó ileso.

Varias llamadas alertaron del siniestro a los servicios de emergencias. Al lugar acudieron una dotación de los Bombers de Palma y patrullas de la Policía Local, que inicialmente trataron de sofocar el fuego con sus extintores. Los agentes cortaron la calle al tráfico para facilitar el trabajo de los bomberos.

El hombre que iba al volante del coche fue sometido a una prueba de alcoholemia. El resultado fue positivo y el conductor está acusado de un delito contra la seguridad vial.

La farola quedó seriamente dañada por la colisión. Estaba previsto que operarios del Ayuntamiento la revisaran a lo largo de la jornada y, si apreciaban riesgo de que se desplomara, la sustituyeran por otra nueva, explicaron fuentes municipales.