El lujoso yate que ardió este sábado frente a la paradisíaca playa de es Trenc ha acabado hundido en el mar. La nave siniestrada, D'Anglaterre, de 33 metros de eslora, se fue a pique la pasada medianoche cuando era remolcada por Salvamento Marítimo hacia Palma y después de que volviera a incendiarse.

El megayate, del que 15 personas que iban a bordo fueron rescatadas y salieron sanas y salvas en es Trenc, actualmente se encuentra en el fondo marino a más de 50 metros de profundidad a unas cinco milas al sur del Cap Blanc, en Llucmajor.

La intervención de Salvamento Marítimo evitó que se produjera un vertido contaminante en el mar. No se ha detectado vertido en la zona del naufragio ni es Trenc. Este domingo a primeras horas de la mañana, el servicio marítimo de la Guardia Civil se sumó y colaboró con Salvamento. La patrullera Río Segura, del Instituto Armado, se movilizó junto con los submarinistas del GEAS, también de la Guardia Civil, para recuperar un tanque de gasoil del barco incendiado.

Después del naufragio la pasada medianoche, salieron a flote varios objetos metálicos del D'Anglaterre, en concreto, tres tanques de combustible. Dos de ellos se fueron a pique finalmente, mientras que el tercero fue recuperado en la mañana del domingo por parte de la Guardia Civil.

Salvamento Marítimo movilizó el sábado por la tarde dos embarcaciones: la Salvamar Acrux y la Illes Pitiüses, que acudieron a es Trenc para luchar contra las llamas. Un avión del Ibanat también sobrevoló el lugar y realizó descargas de agua sobre el yate D'Anglaterre.

La Guardia Civil investiga las causas del incendio. El siniestro se inició en la zona del motor. En un primer momento, empezó a salir humo y luego la nave ardió, principalmente, en la zona de popa. El fuego fue muy virulento. Grandes llamas envolvieron la nave frente al famoso arenal atestado de gente en pleno agosto.

Quince personas que se hallaban en ese momento a bordo del D'Anglaterre abandonaron el barco de alquiler. Primero salieron los pasajeros y, por último, la tripulación. No hubo que lamentar heridos ni intoxicados.

Las tareas de extinción fueron muy complicadas por la gran carga de fuego que se registró y el material altamente inflamable del yate. Medios aéreos y marítimos colaboraron para apagar las llamas. Los daños materiales son millonarios, ya que el lujoso yate ha acabado hundido en el fondo marino.

Una vez se estabilizó la situación, Salvamento Marítimo remolcó la nave humeante hacia Palma. El objetivo era que la Salvamar Acrux llevara el yate afectado hasta unos astilleros de la ciudad. Durante la travesía y antes de llegar a su destino, las llamas se reavivaron la pasada medianoche, lo que resultó fatal para el D'Anglaterre que naufragó a unas cinco millas al sur del Cap Blanc. La embarcación ya estaba muy dañada y acabó deformándose y hundiéndose. El cabo de remolque también se quemó.

Salvamento Marítimo trabajó durante toda la noche y la madrugada hasta la mañana del domingo. La Guardia Civil se sumó a las tareas. No se detectó ningún vertido contaminante, sí manchas superficiales que fueron dispersadas realizando pasadas con las embarcaciones.

El voraz incendio en es Trenc se inició sobre las cuatro de la tarde del sábado. El suceso causó una gran expectación entre bañistas y navegantes que frecuentan este famoso enclave del litoral mallorquín. Una gran columna de humo podía divisarse desde varios puntos como sa Ràpita, s'Estanyol o Campos. Las fotografías y vídeos del lujoso yate envuelto en llamas inundaron las redes sociales en Internet en poco tiempo.

La exclusiva embarcación quemada se anuncia como chárter. Se trata de un lujoso yate de 33 metros de eslora, con seis camarotes y capacidad para doce pasajeros y cinco miembros de la tripulación. Disponía de aire acondicionado, conexión wifi y un jacuzzi en cubierta.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Rescatan a 15 personas al arder un yate en es Trenc

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO