La Guardia Civil desarticuló ayer una de las bandas más activas de traficantes de cocaína en Mallorca. El hallazgo hace dos meses de 80 kilos de esta droga en un carguero en Colombia con destino a la isla, con escala en Algeciras, confirmó las sospechas. Los investigadores del instituto armado realizaron ayer ocho registros en la isla -Palma, Marratxí, Lloseta y Capdepera-, tres en Barcelona y uno en Madrid. Una veintena de traficantes detenidos en Mallorca y la península se sumaron a los arrestados en el país sudamericano.

Además, en una casa de campo de Lloseta fue desmantelado un completo laboratorio para el procesamiento de esta droga. En el sótano de esta vivienda encontraron unos diez kilos de cocaína de gran pureza. Hasta el punto de que, por medio de sustancia de corte, se podía multiplicar por diez y obtener así unos beneficios astronómicos.

Investigadores del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) y la Policía Judicial de la Guardia Civil de Algaida iniciaron las pesquisas hace unos meses. A raíz de las primeras indagaciones, se detectaron estrechos contactos con narcotraficantes colombianos de personas asentadas en Mallorca.

Ante las fundadas sospechas de que estos individuos pudieran estar introduciendo grandes cantidades de cocaína en Mallorca, los expertos de La Guardia Civil establecieron estrechos contactos con la Policía colombiana para tratar de desarticular esta banda. Era el comienzo de la denominada 'Operación Crótalo'.

Tras interceptar hace dos meses 80 kilos de cocaína en el interior de un contenedor de un carguero que se disponía a zarpar de Colombia hacia Mallorca, con escala en Algeciras, se confirmaron de que las sospechas de que se encontraban ante una importante banda de traficantes de cocaína.

Durante estos dos meses, los investigadores trataron de determinar quiénes eran los cabecillas y quién constituía su red para distribuir la cocaína. El golpe de gracia a esta organización de narcotraficantes se asestó a lo largo de la mañana de ayer.

Un total de ocho registros domiciliarios se efectuaron a primera hora de la mañana de ayer en distintos puntos de Mallorca: Palma, Marratxí, Lloseta y Capdepera. La actuación de los efectivos de la Guardia Civil también se hizo extensiva a Barcelona, donde hubo tres registros, y a Madrid, con otro más.

Un centenar de agentes

Más de un centenar de agentes participaron ayer activamente en la fase de explotación de la 'Operación Crótalo'. Entre ellos había 80 efectivos del Grupo de Reserva de Seguridad (GRS) venidos expresamente de Valencia y algunos de ellos desplazados con anterioridad a Mallorca como refuerzo estival.

Sobre las seis y media de la mañana, numerosos efectivos irrumpieron con arietes y escudos en un inmueble situado en una décima planta del edificio Impala III, situado en el número 11 de la calle Joan de Saridakis y a unos 300 metros del Palacio de Marivent. Ante su sorpresa, no había nadie en el interior. Dos agentes quedaron custodiando la puerta y el registro se pospuso.

Acto seguido, los efectivos se desplazaron hasta un inmueble situado en el número 1 de la calle Antoni Noguera. en el barrio de Pere Garau y a escasos metros de la calle Manacor. Ante la sorpresa vecinal, decenas de agentes irrumpieron en un piso de la cuarta planta. En el domicilio se encontraban dos hombres y dos mujeres. Uno de los varones ha sido arrestado.

Los registros en Palma se extendieron a las calle Doctor Barberi (La Vileta), Eduardo Urgorri (sa Indioteria), Pare Jeroni Boscana (es Rafal). Mientras en la Part Forana se irrumpió en un domicilio de la avenida de Antoni Maura, en Marratxí, en la calle San Andrés de Cala Rajada y a un chalé del camí de sa Clota, en Lloseta, donde estaba el laboratorio.

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