"Nos gustaría saber cuándo podremos sacar el coche del barco, pero Baleària no nos informa de nada", protestó ayer uno de los cerca de 400 pasajeros que viajaban en el ferri Pinar del Río, que el viernes, poco antes de la medianoche, tras zarpar de Eivissa, embarrancó en la bocana del puerto de Dénia, donde aún permanece con unos 70 vehículos en su interior. "Allí, junto con el coche, tenemos el equipaje, y necesitamos saber las fechas, porque la vida continúa", reclamó este pasajero que, al fin y al cabo, es afortunado, ya que regresaba de sus vacaciones junto a su familia, que incluye niños pequeños. Otros pasajeros, por contra, están en su misma situación, pero al revés, es decir, intentado emprender unas vacaciones que aún no han podido comenzar en buenas condiciones.

Es la segunda vez en un año que el ferri Pinar del Río sufre un accidente de este tipo. El 8 de junio del año pasado encalló en la bocana del puerto de Sant Antoni. Ni entonces, ni el viernes en Dénia, se produjeron heridos.

Ayer por la mañana, el capitán marítimo de Eivissa y Formentera, Luis Gascón, declaró que era consciente de que el Pinar del Río navegaba con un motor averiado, pero dijo que esta circunstancia no afectaba a la seguridad del buque. Añadió que las causas del accidente no tienen por qué estar relacionadas con el hecho de que el barco tuviera un motor averiado. En cualquier caso, dijo, "las causas del accidente las investiga la Capitanía Marítima de Alicante". Unas dos horas después, Gascón aseguró que la avería del motor ya había sido reparada para cuando el Pilar del Río embarrancó en Denia el viernes por la noche.

Otras fuentes aseguraron que, recientemente, el Pinar del Río tuvo que ser remolcado, hasta en cuatro ocasiones, para poder atracar en los puertos de Eivissa y Palma, una circunstancia que no ha podido contrastar con la naviera, que se limita a sus comunicados de prensa.

En uno de ellos Baleària explicó que el ferri Bahama Mama se encarga desde ayer de cubrir la ruta Denia-Eivissa-Palma en sustitución del Pinar del Río, un catamarán de 70 metros de eslora. Según explicó la naviera, el Bahama Mama empezó a cubrir la ruta a partir de ayer en el trayecto que zarpa del puerto de Palma a las 17.45 horas.

Los pasajeros que tenían reserva para las salidas entre este sábado y domingo en el ferri encallado fueron recolocados en cuatro buques de la compañía.

Por otra parte, Salvamento Marítimo desplegó el sábado por tarde una barrera anticontaminación de forma preventiva, aunque Baleària asegura que no se ha producido ningún vertido de combustible y que la situación del buque encallado en la entrada del puerto no impide el tráfico marítimo en Denia.

Desde Baleària insistieron en que la compañía trabaja en la evaluación de los daños en el casco de estribor del Pinar del Río así como en la elaboración del plan de reflotamiento del barco para poder trasladarlo a puerto y desembarcar los vehículos.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Un ferry encalla en el puerto de Denia con cerca de 400 pasajeros a bordo

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO