Un hombre que apareció el pasado martes malherido en su casa de sa Pobla, con graves lesiones en la cabeza, admitió ayer ante la Guardia Civil que se había golpeado repetidas a sí mismo con un martillo y una pesa en un intento de suicidarse. Los agentes prosiguen las investigaciones, aunque ha quedado casi totalmente descartado que fuera un intento de homicidio.

El hombre fue hallado inconsicente el pasado martes en su domicilio de sa Pobla, con graves lesiones en la cabeza provocados con un martillo. La Guardia Civil puso en marcha una investigación al considerar que podría tratarse de un intento de homicidio. Sin embargo, las últimas gestiones han dado un vuelco al caso. Tras permanecer dos días en coma el herido recobró ayer la consciencia en el hospital de Son Espases y admitió a los agentes que le tomaron declaración que había sido él mismo el autor de sus lesiones. Según dijo, se golpeó hasta siete veces en la cabeza con un martillo y una pesa en un intento de suicidarse.