Tres embarcaciones, de entre cinco y seis metros de eslora, sufrieron un acto de sabotaje durante la madrugada de ayer en el Port de Sóller. Las tres aparecieron pinchadas con unos cortes laterales en el muelle de tránsito donde estaban amarradas.
Los hechos fueron denunciados ante la Guardia Civil. Según los primeros indicios, unos desconocidos habrían nadado hasta las tres embarcaciones neumáticas y les abrieron una raja en los flotadores laterales. Pese al sabotaje, las embarcaciones no se hundieron.
Los propietarios de las embarcaciones descubrieron el sabotaje ayer por la mañana cuando se disponían a iniciar su jornada laboral. La empresa de las tres lanchas neumáticas pertenece a dos hermanos que trabajan en el sector del alquiler de embarcaciones de recreo a turistas.
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