Diez personas resultaron heridas anteanoche cuando un conductor perdió el control de su vehículo, se subió a la acera y arrolló a la gente que estaba sentada en la terraza de un bar en el centro de Girona. Nueve de las víctimas recibieron el alta y solo permanecía ingresada en la UCI pediátrica del Hospital Trueta una niña de 5 años que, aunque seguía grave, evolucionaba favorablemente.
El suceso se produjo al filo de la medianoche del sábado, cuando un vehículo conducido por un joven de 18 años, que dio negativo en el control de alcoholemia y drogas, perdió el control del turismo, se subió a la acera y arremetió contra quienes en esos momentos se encontraban en la terraza del bar Remei, en el barrio de Sant Narcís de Girona. Tres menores y cinco adultos heridos fueron trasladados al Hospital Josep Trueta de Girona y otros dos adultos al Santa Caterina de Salt.
Los Mossos descartaron enseguida que se tratara de un atentado terrorista y fuentes municipales explicaron ayer que el joven que provocó el accidente hacía dos meses que había obtenido el carné de conducir.
La Policía Municipal de Girona investiga ahora las circunstancias en las que se produjo el accidente para determinar la responsabilidad del conductor en los hechos. La alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, manifestó que desde el consistorio "la principal preocupación ahora mismo es que todos los heridos se recuperen favorablemente y lo antes posible", y mostró su confianza en que la niña que permanece ingresada se recupere lo antes posible. "Estamos a disposición tanto de las personas heridas como de sus familias para todo lo que puedan necesitar", dijo.
