Una operación policial contra la venta y consumo de drogas en locales de ocio nocturno de la Playa de Palma se saldó ayer de madrugada con dos detenidos. Uno de ellos fue arrestado por atacar a los agentes y el otro por causar destrozos en aparatos electrónicos en un establecimiento por valor de 4.200 euros.

La actuación conjunta de Policía Nacional y de la Policía Local se produjo en la madrugada de ayer en bares de copas y de otras concurridas zonas de ocio de la Playa de Palma. La operación respondía a las reiteradas quejas vecinales recibidas en las últimas semanas contra determinados establecimientos.

En el transcurso de la inspección, los agentes de la Policía Nacional levantaron cinco actas a varios de los asistentes a estos locales de ocio por tenencia de droga. Mientras, la Policía Local incoó en dos de los establecimientos examinados diversas actas por infracciones de tabaco, en el control de accesos y por tener música fuera del horario.

Insultos y amenazas

La sorpresiva actuación policial contó con la participación de un nutrido número de efectivos. No obstante, pese a la numerosa presencia de agentes, algunas personas no se amilanaron ante el espectacular despliegue y arremetieron contra los policías.

Así, un lituano de 36 años arengó a todos los presentes para que atacaran a los policías que estaban efectuando la inspección. De hecho, después de proferir multitud de insultos y amenazas, él mismo arremetió contra los agentes.

Su acometida fue abortada de inmediato. En el dispositivo también estaban presentes antidisturbios de la Policía Nacional, que habían venido en las últimas semanas como refuerzo en época estival. El atacante fue reducido antes de que pudiera causar daño a algún funcionario. Fue detenido por un presunto delito de atentado a agentes de la autoridad.

Por otro lado, un español de la misma edad del lituano, también de 36 años, fue arrestado como presunto autor de un delito de daños intencionados. Los agentes comprobaron que este individuo había causado importantes destrozos a aparatos electrónicos de un establecimiento. En concreto había golpeado reiteradamente un panel de metacrilato hasta conseguir fracturarlo. Los dos fueron llevados ayer ante el juez.