Los bomberos de Eivissa, la Policía Local de Sant Josep y la Guardia Civil, que movilizó un helicóptero, participaron ayer en el rescate de un excursionista herido al caer de un acantilado de la zona de sa Pedrera. La víctima cayó desde unos cinco metros de altura sobre las ocho de la tarde del martes y sufrió heridas graves. Iba solo y en el lugar no hay cobertura de móvil, por lo que el accidente no se descubrió hasta ayer por la mañana y el hombre, francés de 42 años, tuvo que pasar la noche a la intemperie.

A este conocido enclave de Sant Josep se desplazaron trece bomberos, cinco pertenecientes al Grupo de Rescate Vertical (GRV) del parque del Consell, la Guardia Civil y una ambulancia del 061.

La víctima es un ciudadano francés de 42 años que el martes , sobre las ocho de la tarde, resultó herido al caer desde una altura de unos cinco metros. El excursionista iba solo y en el lugar no hay cobertura telefónica, por lo que nadie se enteró de lo ocurrido y tuvo que pasar la noche al raso. Ayer por la mañana, un amigo al que le había comentado que pensaba hacer esta excursión, fue al lugar y le encontró. Para pedir ayuda tuvo que ir corriendo a un restaurante cercano. Fue entonces, a las nueve y media de la mañana, cuando se puso en marcha el operativo de rescate.

Tras estabilizar a la víctima la Guardia Civil la evacuó en helicóptero hasta el hospital Can Misses con diversos traumatismos. Fue ingresado en Traumatología en estado grave.

Se trata del segundo rescate en la misma zona de Sant Josep llevado a cabo este mes. El pasado domingo los bomberos de Eivissa y la Policía Local de Sant Josep participaron en el rescate de un joven español que sufrió heridas en la espalda tras saltar al mar desde una roca y que no podía volver a subir por su propio pie.

También en Eivissa, los buceadores de la Guardia Civil rescataron ayer el cuerpo sin vida de una mujer en el mar, en la zona de la Cala Sant Vicent. La fallecida era una española de 41 años.