Agentes de la Policía Nacional han concluido la operación "Sileño", en la que han sido detenidas 22 personas, de entre 21 y 51 años de edad, de nacionalidades búlgaras, brasileña, española, colombiana, italiana y portuguesa.

Dos de ellos han sido arrestados tráfico de drogas y otras cuatro que son los encargados de dos conocidos clubs de prostitución, a quienes se les imputa los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, favorecimiento de la inmigración ilegal, contra el derecho de los trabajadores, pertenencia a organización criminal y contra la salud pública.

Los seis restantes de la primera fase (de un total de doce) trabajaban en el establecimiento y fueron detenidos por encontrarse en situación irregular en España.

Las pesquisas se iniciaron en noviembre del año pasado cuando se personaron en dependencias policiales dos personas las cuales denunciaron que en un conocido piso de Palma, donde se ejerce la prostitución, los encargados del mismo estarían engañando a transexuales y mujeres de América latina, especialmente de Brasil y otros países engañados, para luego obligarles a ejercer la prostitución, exigiéndoles una deuda que variaba en función de la victima de entre 7.000 y 14.000 euros.

La Policía Nacional activó el protocolo de intervención ante un posible tema de trata de seres humanos, localizando a otras cinco nuevas víctimas del grupo organizado, las cuales por temor a posibles represalias solicitaron, declarar bajo la condición de "testigo protegido".

Las víctimas eran obligadas a permanecer en el interior de dicho inmueble ejerciendo la prostitución, teniendo que estar disponibles para cualquier cliente durante veinte horas al día, seis días a la semana, y solo podían disponer de algún tiempo libre los domingos.

Las condiciones de habitabilidad que sufrían las víctimas eran infrahumanas. Las cinco personas que ejercían la prostitución se alojaban en una sola habitación del piso, en la que había cuatro literas y un sofá sin ninguna intimidad para ellas. Finalmente se ha acreditado un total de diez víctimas.

Las condiciones económicas de las víctimas también eran nefastas. Eran obligadas a mantener relaciones sexuales y la mitad del importe total pagado por el cliente iba a parar a manos de los detenidos. Este extremo tenía lugar debido al estado de necesidad de la mayoría de las mujeres en sus países de origen ya que las mismas acuden a este país buscando una vida mejor de la que tienen en sus países y acaban ejerciendo la prostitución para los detenidos, viéndose obligadas a aceptar tan viles condiciones de explotación para con ello pagar la deuda contraída con ellos por haberlas traído a España.

Tras gestiones policiales, se confirma que los responsables del grupo delincuencial han traído desde Brasil a una cantidad elevada de ciudadanos brasileños engañados bajo falsas promesas y una vez aquí se les ha obligando a ejercer la prostitución, bajo la coacción de pagar la deuda contraída. Para asegurarse el pago el máximo responsable del grupo utilizaba rituales de brujería y magia negra, valiéndose para ello del miedo infundido a las víctimas a través de dichas prácticas, dado que en ciertas zonas de Brasil estas creencias se encuentra fuertemente arraigadas, pudiendo comprobarse este extremo en el registro domiciliario del máximo responsable de la organización en el que se localizó una habitación dedicada a la brujería en la cual existía una especie de altar dedicado a la adoración al diablo. En dicha habitación se localizó un cofre de madera en cuyo interior se hallaba un contrato a nombre de una de las víctimas localizadas junto con hierbas y piedras, así como unos cuernos de animal envueltos en una prenda de ropa interior.

Durante los tres registros domiciliarios practicados, tanto en la casa donde se ejercía la prostitución como en el domicilio particular de los detenidos, se ha procedido a la intervención de diversa documentación relacionada con la gestión del club de alterne, documentación de otras posibles víctimas que será investigada, así como 50.000 euros.

En el registro practicado en el domicilio de los detenidos, los investigadores hallaron dos plantaciones de marihuana, aprehendiendo un total de 200 plantas, así como un complejo sistema de cultivo que incluye lámparas de gran potencia, extractores con filtros de carbono y otros artilugios cuyo suministro eléctrico obtenían mediante una conexión fraudulenta a la red eléctrica.

De manera paralela y a través de las declaraciones de varias víctimas, se obtiene información en la que presuntamente un conocido abogado estaría realizando matrimonios ficticios entre ciudadanos de la Unión Europea y Extranjeros irregulares, entre ellos las victimas de trata de seres humanos del anterior grupo organizado, tratándose de brasileños y venezolanos transexuales, para conseguir de esta manera que éstos obtengan la residencia legal en España, cobrando a estas víctimas la cantidad de 5.000 euros por la realización del matrimonio.

Por estos hechos relacionados se procede a la detención de 10 personas, por falsedad documental y favorecimiento de la inmigración ilegal, entre ellos el letrado.En total han sido detenidas 22 personas,

12 en una primera fase y 10 en la segunda, de lo que se han instruido diligencias policiales remitidas al Juzgado de Instrucción de Guardia de Palma de Mallorca.

La Policía Nacional mantiene activadas la línea telefónica 900105090 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.