El incendio del carguero Grande Europa, que el pasado 15 de mayo causó daños millonarios y estuvo a punto de provocar un vertido catastrófico en aguas de Cabrera, ha dado un giro inesperado esta semana cuando la Guardia Civil, tras una compleja investigación ha detenido al capitán y a dos oficiales, como presuntos responsables del fuego. Otro oficial está imputado por los mismos hechos. Los tress detenidos fueron puestos ayer por la tarde a disposición del juzgado de guardia de Valencia.

Las circunstancias en las que se produjeron los dos incendios a bordo en el barco, que con una carga de 1.687 vehículos cubría la ruta entre Salerno (Italia) y Valencia, había despertado las sospechas de la Guardia Civil. Los dos fuegos se declararon con apenas tres horas de diferencia en dos cubiertas distintas, sin conexión entre sí. Se daba la circunstancia de que un barco gemelo, el Grande América, se había hundido tras otro incendio el 12 de marzo en el Golfo de Vizcaya, frente a la costa francesa, y provocado un desastre ecológico.

En el caso del Grande Europa, el incendio pudo ser controlado gracias a la intervención de la tripulación y el operativo de Salvamento Marítimo. El carguero llegó al día siguiente al puerto de Palma con grandes daños entre los vehículos que transportaba, pero a flote. Una vez solucionada la emergencia, la maltrecha nave fue remolcada hasta el puerto de Valencia

La Guardia Civil inició de inmediato una investigación para tratar de determinar las circunstancias en las que se había producido el fuego. En estas investigaciones han colaborado agentes de la Policía Judicial de las comandancias de Palma y Valencia.

Los investigadores, tras tomar declaración a todos los testigos y realizar una exaustiva inspección ocular en las bodegas en las que se declararon los incendios, llegaron a la conclusión de que habían sido intencionados. Las gestiones policiales han culminado el pasado viernes, cuando agentes de la Guardia Civil desplazados a Valencia y compañeros de la Comandancia de Valencia procedieron a la detención del capitán y otros dos oficiales del carguero, todos italianos, como presuntos responsables del fuego. Los tres fueron puestos ayer a disposición del juzgado de guardia de Valencia.

Los incendios destruyeron cientos de los vehículos y causaron pérdidas millonarias.