Los forenses mantendrán hoy ante el tribunal del jurado de la Audiencia de Palma que el alemán Horst Hans Henkels, hallado muerto en su casa de Cala Millor y cuyo asesinato se atribuye a su esposa, Svetlana B., no falleció por el ataque de sus perros, como sostiene la acusada.
Los forenses practicaron la autopsia al alemán, de 70 años, y que presentaba lesiones de mordeduras de perros. Sin embargo, los médicos discrepan de la versión de la mujer que asegura que los canes atacaron a su marido, que falleció desangrado.
Los forenses también han examinado el estado mental de Svetlana, que alega haber consumido drogas y padecer importantes trastornos. Los peritos sí detectaron trastornos en la acusada, pero sin que esas disfunciones anulasen su capacidad volitiva e intelectual.
El juicio contra Svetlana empezó el pasado lunes ante un jurado popular y está previsto que dure varios días más.
Tomeu Salas, defensor de la presunta asesina, ha encargado otro informe pericial a cargo de un experto que mantiene que el falleció murió por el ataque de sus perros.
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