El menor acusado de matar a su madre en el domicilio familiar acusado de matar a su madre en el domicilio familiaren s'Arenalexplicó a su novia que estaba harto de la mala relación que tenía con su progenitora y que esta le pegaba y le reñía de forma habitual. Su pareja, de 17 años, detalló que los encontronazos entre madre e hijo eran frecuentes. En una ocasión, cuando una amiga de la víctima recriminó al joven que utilizara su tarjeta de crédito sin su permiso, él le contestó que no le abroncara más porque su progenitora ya le había pegado. El adolescente de 16 años no sentía ningún apego por ella. El joven, que ingresó el pasado martes en el centro es Pinaret por orden judicial por homicidio y estafa, se crió con otros familiares en Ecuador. Desde los 13 a los 16 años convivió con su madre en la isla. Pese a que se negó a declarar ante el fiscal de menores de Balears, sí confesó el crimen con todo detalle a su novia y a los técnicos que lo examinaron. Llamó la atención que no se mostró arrepentido.

El detenido relató a su pareja tras la huida de ambos a Bélgica que había discutido con su madre, Gloria Zavala, de 53 años, y en un forcejeo en el garaje de casa ella había caído al suelo y él la había estrangulado hasta matarla, según la versión de la chica, que también fue internada en régimen cerrado el martes por la tarde en el centro es Fusteret.

Los investigadores creen que el crimen se produjo la tarde del pasado viernes 10 de mayo. Ese día, el joven sospechoso llegó tarde a una hamburguesería donde había quedado para comer con su novia. El joven se retrasó más de una hora y, cuando se presentó en el local, tenía las manos muy rojas, según recordó la chica.

Una vecina que intentó acceder a su garaje en s'Arenal el viernes por la tarde se encontró con un candado que le impedía el paso. Llamó a la casa del chico y, tras esperar cinco minutos, el joven salió con sangre en la nariz y le indicó que su madre le había dicho que cerrara la verja del aparcamiento porque tenía que limpiar. Este hecho tan extraño se une a otros indicios como los datos de geolocalización de los teléfonos móviles de la pareja, que sitúan a ambos en el lugar de los hechos en esas fechas, así como su huida precipitada en avión a Barcelona y luego a Bélgica, poco antes de que fuera hallado el cadáver de la mujer envuelto en plásticos bajo un arcón en el garaje de casa y después de que su hijo denunciara su desaparición ante la Policía Nacional.

La fuga de la pareja de novios durante una semana les costó unos mil euros. Según las pesquisas, el hijo de la fallecida pagó todos los gastos de los pasajes de avión, su estancia en un camping de Gavà (Barcelona) y luego en un hotel de Bruselas gracias a la numeración de una tarjeta bancaria que pertenecía a una amiga de la víctima. Por ello, está acusado también de un delito de estafa.

Extradición

Al cabo de una semana, los dos sospechosos fueron localizados y arrestados por la policía belga en Bruselas, en cumplimiento de una orden europea de detención. Los dos menores fueron extraditados a España y el pasado lunes aterrizaron en Palma en una avioneta de la Policía. Acto seguido, fueron conducidos ante la fiscalía de menores de Balears.

El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional, encargado de la investigación, comprobó que la chica arrestada había borrado su rastro en las redes sociales, había desinstalado la aplicación de WhatsApp de su teléfono móvil y su terminal no estaba operativo. Una testigo señaló que la vio preocupada los últimos días. De hecho, la joven reconoció en la sede judicial de sa Gerreria que su novio le había roto la tarjeta de su teléfono móvil cuando ambos ya se encontraban en Barcelona para que no los pudieran localizar. Su abogada defensora recurrirá el auto que ordena su internamiento en es Fusteret.