Los padres de la niña de cinco años fallecida el pasado viernes en el colegio La Salleniña de cinco años fallecida el pasado viernes en el colegio La Salle, en Palma, se personarán en la causa judicial abierta. Los progenitores han contratado ya los servicios de un abogado para que defienda sus intereses y están a la espera de que se aclare la causa de la muerte. Los forenses no han podido determinar si la pequeña sufrió una reacción alérgica tras consumir un helado, como se sospecha, y están a la espera de los resultados de varias pruebas. Mientras, la Policía sigue llevando a cabo diversas diligencias para aclarar los hechos.

La necropsia, practicada anteayer en el Instituto de Medicina Legal, confirmó que la pequeña murió debido a una parada cardiorrespiratoria, pero no reveló qué la desencadenó, cómo informó ayer este diario. La niña padecía problemas respiratorios y varias alergias, una de ellas a la proteína de la leche. Había sido hospitalizada varias veces y su estado de salud era delicado.

En el centro escolar conocían estas dolencias y su dieta en el comedor escolar estaba adaptada. De hecho, su sitio estaba marcado para que no le dieran alimentos que no pudiera tomar. El pasado viernes a la niña le dieron de postre un helado de nata sin lactosa. Apenas lo había probado cuando empezó a sentirse mal. Fue trasladada a la enfermería del colegio y atendida por efectivos médicos del Ib-Salut, pero la pequeña falleció allí mismo.

La primera hipótesis de los investigadores fue que la menor había sufrido una reacción alérgica severa. Una posibilidad que no ha podido confirmarse por el momento. La víctima, según fuentes conocedoras del caso, no presentaba los signos más frecuentes en casos de shock anafiláctico, como son urticaria e hinchazón.

Para intentar despejar las dudas, los médicos forenses han solicitado un estudio completo tanto a Son Espases como al Instituto Nacional de Toxicología. Esta prueba revelará todas las alergias, diagnosticadas o no, que padecía la niña y en qué grado. Además, se realizará una prueba específica para determinar el nivel de triptasa en su organismo y si sufrió una reacción alérgica antes de morir. Por el momento, no existen evidencias de que la muerte de la pequeña esté relacionada con los alimentos que tomó en el colegio.

A la espera de estos análisis, los padres de la menor han contratado ya los servicios de un abogado para personarse en el procedimiento abierto en un juzgado de instrucción de Palma por el fallecimiento de la niña.

Mientras, el grupo de Homicidios de la Policía Nacional sigue realizando gestiones para esclarecer cómo ocurrieron los hechos. Los investigadores están tomando declaración en los últimos días a numerosos testigos.