La Audiencia Provincial ha condenado este viernes a tres años de prisión a un hombre que dejó cojo a otro al propinarle un puñetazo en la cara en s'Arenal. La víctima, que intentaba evitar que el procesado atacara a otra persona con una silla, sufrió lesiones muy graves que le han dejado como secuela la parálisis en la pierna derecha, por lo que precisa andador. El procesado deberá indemnizarla con 145.000 euros. El sospechoso ha reconocido los hechos ante el tribunal y se ha conformado con la pena.

Los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana del 13 de julio de 2017 en la terraza de un local situado en la avenida Cartago, a la altura del balneario 2, en s'Arenal. El acusado, de 22 años, se enzarzó en una discusión con otra persona por motivos que no han sido aclarados. Durante la trifulca, el joven cogió una silla y trató de golpear con ella a su rival.

Varias personas se interpusieron para evitar la agresión. El acusado la emprendió también contra ellos. Así, propinó un fuerte puñetazo en la cara a uno de estos testigos, que cayó desplomado al suelo. La víctima quedó inconsciente. Sufrió un traumatismo craneoencefálico grave, con lesiones internas, y fue hospitalizado de urgencia.

El joven estuvo 26 días ingresado en la UCI, sedado e intubado. Luego precisó tratamiento rehabilitador y tardó más de medio año en recuperarse. Sin embargo, le quedaron importantes secuelas, como la parálisis de la pierna derecha, alteraciones cognitivas y disminución del campo visual.

La fiscalía reclamaba inicialmente cuatro años de prisión para el acusado, que está encarcelado desde que ocurrieron los hechos. Este viernes, el ministerio público ha rebajado su petición a tres años de reclusión tras alcanzar un acuerdo con la defensa.