La Guardia Civil arrestó ayer por la mañana a una mujer cuando iba a acceder a la cárcel de Palma con distintas cantidades de cocaína y hachís encima. Los agentes detectaron la droga durante un control rutinario en la entrada del centro penitenciario gracias a la intervención de un perro adiestrado. El can marcó las sustancias estupefacientes y la mujer fue detenida por un delito contra la salud pública.

Los investigadores aprehendieron a la sospechosa unos 30 gramos de hachís y 15 gramos de cocaína. La droga fue incautada para su posterior análisis. Por su parte, la arrestada fue conducida ayer por la tarde a los juzgados de Vía Alemania de Palma, para ser puesta a disposición judicial. Inicialmente, está acusada de tráfico de drogas, del subtipo agravado al haber sido interceptada en el centro penitenciario.

La mujer fue sorprendida ayer por la mañana cuando el perro de la Guardia Civil detectó que portaba sustancias estupefacientes encima.