La responsable de una agencia de viajes de Sóller ha aceptado casi dos años de prisión por estafar unos 38.000 euros a 21 clientes. La mujer ha admitido durante el juicio que se quedó el dinero que los afectados le entregaban para abonar sus viajes y se ha declarado autora de un delito continuado de estafa. Se le ha apreciado la atenuante de reparación del daño porque había consignado ya más de la mitad del dinero para resarcir a los perjudicados.

La acusada ha reconocido en la Audiencia Provincial que cometió el fraude entre enero de 2016 y febrero de 2017. Durante esos meses, recibió dinero de una veintena de clientes para pagar vuelos y estancias en hoteles en destinos como Cuba, Estados Unidos, Canadá, Argentina o cruceros por el Mediterráneo. La procesada solo abonaba una pequeña parte de estas cantidades y se quedaba el resto, por lo que los mayoristas acababan cancelando las reservas.

El perjuicio para los afectados fue doble. Por un lado, perdían el dinero entregado en la agencia de viajes y por otro debían pagar otra vez para disfrutar de sus vacaciones. Una de las víctimas llegó a dar su número de tarjeta de crédito, que la acusada utilizó para realizar reintegros de hasta 8.000 euros.

La procesada, tras ser denunciada e imputada por estos hechos, consignó 20.000 euros para hacer frente a las indemnizaciones. La fiscalía le acusó de un delito continuado de estafa con la atenuante de reparación del daño y reclamó dos años y medio de cárcel para ella.

Hoy, antes del juicio en la Audiencia de Palma, la fiscalía, la acusación particular y el abogado defensor, Josep Perelló, han alcanzado un acuerdo de conformidad. La mujer ha aceptado finalmente una condena de 21 meses de cárcel, que queda suspendida a condición de que abone el resto de las indemnizaciones en un plazo de dos años.