Un individuo de 37 años, armado con un cuchillo de grandes dimensiones, amenazaba con clavárselo la tarde del lunes a todos los transeúntes con los que se cruzaba. Tras la alarma que provocó, agentes de la Policía Local de Palma acudieron al lugar equipados con chalecos anticorte y antipunzón. El sujeto esgriimió el cuchillo contra ellos y los policías sacaron su arma reglamentaria. Firnalmente fue reducido y detenido por un presunto delito de atentado a agentes de la autoridad.

Los hechos ocurrieron sobre las ocho y media de la tarde del lunes en el barrio palmesano de Corea. Un sujeto, armado con un cuchillo de 34 centímetros y 21 solo de hoja, amenazaba con clavárselo a todo aquel peatón que acertara a pasar por el lugar. Acto seguido, los testigos avisaron a los servicios de Emergencia para alertar del peligro que representaba este individuo.

Instantes después, una patrulla de la Policía Local de Palma. Los agentes, provistos de chaleco antibalas, anticorte y antipunzón, encontraron al sospechoso a la altura del número 115 de la calle General Riera, entre las calles Cotlliure y Felipe II. El hombre trató de irse. Pero los funcionarios le instaron a que se detuviera. Lejos de acatar la orden, se revolvió y sacó el enorme cuchillo.

A continuación, los funcionarios le conminaron a que tirara el arma blanca. El sujeto hizo caso omiso y, además, esgrimió el cuchillo de manera amenazante contra ellos. Acto seguido, los agentes tuvieron que desenfundar su pistola reglamentaria. No tuvieron que hacer ningún disparo de advertencia. Finalmente, el agresor tomó conciencia de su manifiesta inferioridad y decidió arrojar el puñal. Acto seguido fe reducido y detenido por un presunto delito de atentado a agentes de la autoridad.