Mientras los residentes dormían en casas de lujo en Mallorca, dos delincuentes albanokosovares, altamente especializados, se introducían en las viviendas y les sustraían todos los objetos de valor. Coches de gama alta incluidos. La Guardia Civil les ha detenido por su presunta participación en más de medio centenar de fechorías en toda la isla.

Un espectacular despliegue de efectivos del instituto armado se movilizó el lunes en es Pil·larí para detener a estos dos delincuentes. Los agentes les han intervenido cuatro vehículos de gama alta sustraídos, entre los que se encuentra un Porsche valorado en 145.000 euros, y 6.000 euros en efectivo, en moneda extranjera.

Las pesquisas se iniciaron a finales del pasado año. Una serie de robos se habían cometido en diversas residencias de lujo de Mallorca, que mantenían un mismo patrón. En todas las fechorías -cometidas en lugares de la isla tan dispares como Portals Nous, Artà, Son Serra de Marina o Sant Joan- los delincuentes utilizaban un mismo 'modus operandi'. Accedían siempre de noche al interior de las suntuosas viviendas, mientras los moradores se encontraban dormidos.

A partir de estos datos, los investigadores de la Guardia Civil de Pont d'Inca y de Llucmajor activaron la denominada 'Operación Grey Lion'. Los delincuentes demostraron ser unos consumados especialistas. Utilizaban diversas técnicas para acceder al interior sin ser detectados. Forzaban los bombines de las cerraduras, perforaban las puertas o bien usaban palancas.

Uno de los lugares donde perpetraron más robos fue Valldemossa. Hasta el punto de que crearon una gran alarma social. Buena prueba de ello es que cometieron tres robos en una sola noche.

Medidas de vigilancia

Con carácter previo a cometer el delito, los ladrones montaban vigilancias para asegurarse el éxito y para evitar ser descubiertos por la Guardia Civil. Gracias a su alta especialización, estos delincuentes cometieron numerosas fechorías sin ser descubiertos y se habían convertido en unos de los más activos.

Además, muchos de los coches que robaban en las viviendas que desvalijaban los estacionaban en distintos lugares donde tenían planeado cometer sus siguientes golpes. De esta forma se aseguraban la huida en caso de ser sorprendidos.

Durante el registro de la vivienda de los delincuentes en es Pil·larí, los investigadores de la Guardia Civil encontraron las herramientas que habían utilizado para cometer los delitos. Se han esclarecido 20 robos, pero se cree que pueden haber actuado en 50.