Un hombre fue condenado ayer a dos años de cárcel por agredir con una muleta a un compañero de piso durante una discusión en el Port d'Alcúdia. El acusado admitió que propinó un golpe en la cara a la víctima, que sufrió lesiones y precisó puntos de sutura. El procesado, de 61 años, admitió los hechos durante el juicio y se conformó con la pena solicitada por la fiscalía. Deberá indemnizar al perjudicado con 937 euros.

Los hechos ocurrieron hacia las cuatro y media de la tarde del 9 de julio de 2016 en el piso que compartían los dos hombres. Ambos se enzarzaron en una discusión por cuestiones de convivencia.

Durante la riña, el acusado propinó un golpe en la cara a su compañero de piso con una muleta. El afectado sufrió una brecha junto al ojo izquierdo y tuvo que ser atendido en un centro médico. Precisó varios puntos de sutura y tardó una semana en recuperarse de las lesiones. Como secuela le quedó una cicatriz en la ceja izquierda.

La fiscalía acusó al agresor de un delito de lesiones con instrumento peligroso, por el que reclamó dos años y medio de cárcel. Además, solicitó que indemnizara a la víctima con 210 euros por las heridas que le causó y con otros 727 por la secuela.

El procesado compareció ayer en un juzgado de lo penal de Palma, donde admitió los hechos después de que su defensa y la fiscalía alcanzaran un acuerdo de conformidad. El ministerio público rebajó su petición a dos años de cárcel, y el acusado aceptó esta condena. Las partes acordaron también que el cumplimiento de la pena quede suspendido por un plazo de dos años, a condición de que no delinca y pague la indemnización al perjudicado en el plazo de un año.