Los Bombers de Mallorca y la Guardia Civil localizaron ayer a las once y cuarto de la mañana el cadáver de un joven estadounidense de 20 años que desapareció el viernes al mediodía en la zona de Cala Deià. El cuerpo fue hallado en un acantilado, por lo que se sospecha que la víctima se precipitó de unos doce metros de altura por una grieta.

La Guardia Civil está investigando los hechos. La principal hipótesis que manejan es que se trata de una muerte accidental cuando el excursionista estaba haciendo senderismo o trataba de escalar una pared y cayó al vacío contra unas rocas. Sin embargo, los agentes no descartan otras posibilidades, ya que el joven se separó del grupo con el que iba y siguió caminando solo, lo que resulta extraño.

El muchacho, que se encontraba de vacaciones en la isla, iba acompañado por cuatro amigos cuando ayer al mediodía se separó del grupo y siguió caminando por su cuenta él solo por las inmediaciones de Cala Deià. Pasado un tiempo, al comprobar que no regresaba, sus allegados dieron la voz de alarma. En ningún momento acudió al vehículo que tenían estacionado en las cercanías.

El Grupo de Montaña de los Bombers de Mallorca de Sóller e SóllerInca, con el apoyo de un guía canino, y empezó con las tareas de rastreo. Los especialistas del Grupo de Rescate en Montaña (GREIM) y el helicóptero de la Guardia Civil se sumaron al operativo a la misma hora. Al caer la noche y no encontrar ninguna pista del joven, la aeronave regresó a su base. Mientras, el equipo del GREIM continuó con la búsqueda durante toda la madrugada, con el apoyo de una patrulla de Seguridad Ciudadana.

Ayer por la mañana, los especialistas de los grupos de montaña de los bomberos de Sóller y de la Guardia Civil continuaron con las labores de rastreo, relevando a sus compañeros, en los alrededores de donde fue visto por última vez el excursionista estadounidense en Cala Deià.

Transcurridas unas horas, sobre las once y cuarto de la mañana de ayer, un bombero descubrió el cadáver del joven en unas rocas en una zona acantilada. Las pesquisas apuntan a que se precipitó de unos doce metros de altura por una grieta. Pudo tratarse de un accidente de montaña.

Los especialistas procedieron luego a rescatar el cuerpo sin vida del senderista. El juzgado de guardia de Palma fue informado del óbito. Está previsto que el próximo lunes se le practique la autopsia.