La Audiencia de Palma condenó este lunes a un joven a un año y medio de prisión por romper dos dientes a un menor de 16 años de un puñetazo en la cara a la salida de una discoteca de Manacor en marzo de 2017.

El acusado, de 20 años, reconoció los hechos ante el tribunal de la sección primera y se declaró autor de un delito de lesiones.

El sospechoso se conformó con la pena de un año y seis meses de cárcel y una indemnización de 2.000 euros para sufragar el tratamiento de ortodoncia al que la víctima se va a tener que someter, ya que debido al golpe cinco piezas dentales se vieron afectadas.

La magistrada presidenta de la sala dictó este lunes al mediodía sentencia 'in voce'. El agresor no ingresará en prisión debido a que el tribunal le ha suspendido la pena por un periodo de tres años con la condición de que no vuelva a delinquir y que pague la responsabilidad civil en dos meses.

En un principio, el muchacho se enfrentaba a una petición de condena de cinco años de cárcel de la fiscalía, pero este lunes las partes han alcanzado un acuerdo después de que el ministerio público rebajara su solicitud de pena.

Los hechos ocurrieron el pasado 19 de marzo de 2017, sobre la una y media de la madrugada, cuando el acusado discutió con un amigo del perjudicado en una discoteca de la zona de Manacor.

Tras la disputa, el sospechoso esperó a ambos a la salida del local y propinó un puñetazo a la víctima en la cara, provocando que cayera al suelo y perdiera momentáneamente el conocimiento.

Debido a este golpe, el perjudicado, un menor de 16 años, sufrió lesiones en la boca y la rotura de dos incisivos. Además, otros tres dientes resultaron afectados.