Una mujer brasileña logró escapar de un piso de Palma después de que su pareja le propinara una paliza y la tuviera retenida allí toda la noche. Bajo el pretexto de hacer algo de comida, la víctima pudo abrir la puerta y huir. El maltratador fue tras ella, pero el sujeto escapó al percatarse de que la afectada era protegida en la calle por dos albañiles.

El presunto agresor que tiene antecedentes por violencia de género a otras dos parejas anteriores, se encuentra además en tercer grado penitenciario.

"Sé que me vas a dejar"

Los hechos ocurrieron sobre la una y media de la tarde del miércoles en la calle Jaume Ferrer de Palma. Una mujer, de nacionalidad brasileña de 40 años, pudo escapar de su casa en un descuido de su pareja después de haberla agredido y retenido durante toda la noche. La víctima se dirigió a la cocina con la excusa de hacer algo de comida. "Sé que me vas a dejar", espetó a la víctima el agresor machista para justificar haberla golpeado y encerrado en el cuarto contra su voluntad. El maltratador la dejó salir entonces de la habitación. En su lugar, la maltratada abrió la puerta y echó a correr hasta la calle.

El maltratador fue tras ella, pero la mujer pidió protección a unos albañiles que se encontraban en ese momento en la calle. El agresor se amedrentó y regresó a su domicilio. Agentes de la Policía Local de Palma acudieron al lugar. La víctima presentaba un hematoma en el rostro, sangre en la frente, marcas en el cuello y los dedos hinchados. También aseguró a los policías que su pareja la había intentado estrangular.

Los policía acudieron al domicilio y encontraron la vivienda revuelta. El maltratador, de 37 años, no estaba allí. No obstante está plenamente identificado y se tiene constancia de que se encuentra en tercer grado penitenciario y pernocta en el centro de inserción social de Son Malferit. Tiene antecedentes por violencia de género