Un hombre ha sido detenido por tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico y violencia de género después de que su pareja le denunciara por malos tratos. Al acudir al domicilio de Son Gotleu, agentes de la Policía Local de Palma intervinieron 52 plantas de marihuana y numerosos aparatos para favorecer su rápido crecimiento. Todos ellos conectados ilegalmente a la red eléctrica.

Los hechos ocurrieron sobre las diez de la mañana del pasado lunes. Una mujer llamó a la Policía Local para denunciar que había sufrido un episodio de malos tratos en su vivienda del Passatge Pic Alcazaba de Son Gotleu. Una mujer, española de 36 años, aseguró que su pareja le había intentado tirar por la ventana de la vivienda.

Cuando los agentes se encontraban en el domicilio de la mujer, un policía abrió una puerta y se topó con una importante plantación de marihuana así como distintos útiles para su cultivo: humidificadores portátiles, calefactores y siete lámparas caloríficas. Cuando los funcionarios de la Policía Local le preguntaron por las plantas, la mujer fue clara y rotunda: "es de mi pareja", indicó.

A continuación, los agentes solicitaron una orden judicial de entrada y registro. En el interior intervinieron 52 plantas de marihuana y los aparatos para facilitar su crecimiento. Asimismo, los policías llamaron a técnicos de Gesa, tras comprobar cómo un cable salía de dicha plantación hacia la planta baja del edificio. Los expertos acudieron para desconectar el enganche ilegal y para hacer una valoración del montante defraudado a la compañía eléctrica.