Un juzgado penal de Palma condenó ayer a seis meses de prisión a Alejandro Ortiz, el padre de Malén, la menor desaparecida en diciembre de 2013 entre Magaluf y MagalufSon Ferrer, por increpar a varios policías locales de Calvià que finalmente le detuvieron en su domicilio en Santa Ponça en septiembre de 2018. El sospechoso también causó desperfectos en el vehículo policial cuando fue arrestado.

El hombre reconoció ayer los hechos ante la sala y se declaró autor de un delito de resistencia y otro delito leve de daños. Aceptó una pena de medio año de cárcel y una multa de un mes a razón de cuatro euros diarios, es decir, de 120 euros.

Tras admitir los cargos, la magistrada dictó sentencia 'in voce' contra él. La jueza apreció la circunstancia atenuante de trastorno y también le suspendió la pena de prisión por un periodo de dos años, durante los cuales no podrá volver a delinquir.

Los hechos tuvieron lugar el pasado 27 de septiembre de 2018, sobre las nueve de la noche, cuando Alejandro Ortiz se hallaba en su casa, en Santa Ponça. Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Calvià se movilizaron y acudieron al domicilio tras ser alertados por los vecinos debido al estado de agitación que presentaba el padre de Malén.

El progenitor encausado se negó a que los agentes entraran en su vivienda y bajó con ellos al aparcamiento comunitario para mostrarles su identificación.

En ese momento, se dirigió a ellos profiriéndoles frases como: "Maltratadores El hombre, muy alterado, se centró especialmente en un policía local de Calvià en concreto al que le dijo: "Me has matado a mi hija, te voy a matar, el alcalde mañana se va a enterar, lo voy a matar".

Acto seguido, cuando el sospechoso iba a ser introducido en el vehículo policial, comenzó a lanzar patadas contra los agentes sin llegar a agredirles.

Además, golpeó de forma repetida el coche patrulla de la Policía Local de Calvià y causó desperfectos por valor de 318 euros. Finalmente, Alejandro Ortiz fue detenido esa misma noche y al día siguiente quedó librequedó libre tras pasar a disposición del juzgado de guardia de Palma.

Su hija, Malén Ortiz, desapareció en diciembre de 2013. Entonces, tenía quince años. La menor fue vista por última vez cuando se apeó del autobús escolar en la rotonda de los piratas en Magaluf. Se dirigía hacia Son Ferrer, pero nunca llegó a su destino y su rastro se perdió. La Guardia Civil lleva más de cinco años investigando el caso. La familia de Malén ha realizado numerosos actos en Calvià.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Alejandro Ortiz: "La Guardia Civil está revisando el caso de Malén desde cero"
  • El padre de Malén recibe atención psiquiátrica tras enfrentarse a la Policía

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO