"El coche estaba parado en todo momento. No tenía intención de conducir y no arranqué el coche". Con estas palabras argumentó ayer un hombre en la Audiencia de Palma

Como cuestión previa, las defensas de los agentes del instituto armado se opusieron a la admisión como prueba de un vídeo de la Marina Botafoc. En dichas imágenes se veía el coche del detenido estacionado en la calle, por lo que no habría circulado. Tras visionarlo y encerrarse a deliberar, el tribunal decidió admitirlo.

Los guardias civiles decidieron declarar en la vista después de que lo hicieran otros testigos. Así, el dueño de un coche Mercedes negó que se dispusiera a conducir el vehículo. "Habíamos quedado a tomar copas y esperamos dentro a que llegaran unos amigos. No íbamos a conducir", afirmó el que a la postre fue detenido.

Los agentes, por su parte, coincidieron en señalar que vieron el vehículo "en movimiento". El coche patrulla de la Guardia Civil circulaba el 25 de abril de 2012 por la Marina Botafoc de Eivissa y se pusieron a la altura del otro turismo al "girar las ruedas y arrancar", indicaron.

Los guardias civiles sustentaron su versión de lo ocurrido en que el dueño del coche "no dijo en ningún momento que no condujera". Tras avisar a la Policía Local. estos le realizaron la prueba de alcoholemia. "Dio un resultado de 0.87 y le comunicamos que quedaba detenido. En un principio,el propietario del Mercedes fue trasladado a la comisaría de la Policía Local y luego a las dependencias del instituto armado junto al aeropuerto para tomarle declaración. "Nos hicieron bajar del coche, nos registraron. No eran buenas maneras", abundó el posteriormente arrestado.

Al día siguiente, el propietario del coche acudió a Marina Botafoc y pidió una grabación del vídeo, tal y como declaró ayer en la Audiencia de Palma. En las imágenes se observaba cómo dicho vehículo estaba aparcado en la calle y no se movió del sitio.

Un perito de la defensa de los agentes declaró que este guardia civil "había perdido agudeza visual y tiene astigmatismo". Con estos defectos de la vista, el especialista trató de explicar que el guardia civil pudiera haber visto el coche en movimiento, aunque no lo estuviera.

El juicio quedó suspendido hasta el próximo 13 de marzo, debido a que un policía local que intervino el día de autos se encontraba de viaje.