Una madre y su hijo permanecían echados en las butacas de su vivienda en Selva en estado semiinconsciente mientras la estancia se inundaba del humo tóxico de la combustión de dos chimeneas. Una patrulla de la Guardia Civil acudió al inmueble y sacó al exterior a las dos víctimas en grave peligro de perecer por la intoxicación de monóxido de carbono.

Los hechos tuvieron lugar el pasado 21 de febrero en un domicilio de Selva. La alarma en la vivienda se había activado y llegó al Centro Operativo Complejo de la Guardia Civil. Desde aquí se dio aviso a las patrullas que estuvieran por la zona para que acudieran a la vivienda con la mayor brevedad.

Una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil acudió al inmueble. Al acceder al interior, los agentes vieron a una madre y a su hijo tendidos en dos butacas. Las víctimas estaban semiinconscientes debido a la acumulación de monóxido de carbono por la combustión de dos chimeneas.

A continuación, los efectivos del instituto armado sacaron a las dos víctimas al exterior y les realizaron primeros auxilios hasta la llegada de las asistencias sanitarias. Acto seguido, la madre y su hijo fueron trasladados en ambulancia al Hospital de Inca.