Un dispositivo especial conjunto de Policía Nacional y de Policía Local se desplegó el miércoles por la tarde en el conflictivo barrio palmesano de Son Gotleu. Como resultado de esta actuación, dos mujeres, de 41 y 23 años, fueron detenidas como presuntas autoras de un delito contra la salud pública, tras intervenirles seis kilos y medio de marihuana. También se les acusa de defraudación de fluido eléctrico, al tener enganches ilegales a la red para favorecer el crecimiento de las plantas.

Las pesquisas policiales indicaban que un domicilio de Son Gotleu había sido reconvertido en un criadero de marihuana. La abultada factura eléctrica impagada por los enganches ilegales a la red delataban que la vivienda podría albergar un gran invernadero de cannabis sativa.

Las sospechas se confirmaron nada más entrar en el domicilio, con la correspondiente orden judicial. El domicilio se había transformado en un punto de cultivo y producción a gran escala de marihuana para su posterior distribución y venta. En el inmueble fueron intervenidos seis kilos y medios de esta sustancia estupefaciente.

Asimismo, los agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local se encontraron en el interior de la vivienda a dos mujeres, que la estaban ocupando ilegalmente. Además de la marihuana y de las conexiones ilegales de fluido eléctrico. los efectivos encontraron en el domicilio numerosos útiles para su culivo y producción, tales como lámparas, aparatos de refrigeración, extractores, filtros y otros efectos.

También encontraron, oculto entre plásticos y bolsas de basura, de un bar de Son Gotleu un patinete eléctrico, presuntamente sustraído, con la marca de una empresa de alquiler. El propietario del establecimiento dijo desconocer por completo qué hacía allí.

Se trata de la segunda actuación conjunta de la Policía Nacional y la Policía Local que tiene lugar en Son Gotleu en el mes de febrero. Sobre las cinco de la tarde del pasado viernes 15 de febrero, se movilizaron un centenar de agentes en el barrio en la denominada 'Operación Warrior'. La redada perseguía el tráfico de drogas, la inmigración clandestina y las irregularidades en diversos establecimientos. Un total de cinco personas fueron arrestadas entre la tarde del viernes y la mañana del sábado 16.