La consellera de Sanidad, Ana Barceló, ha asegurado este jueves que el restaurante El Riff de Valencia, investigado tras la muerte de una clienta el pasado fin de semana, seguirá cerrado hasta que se sepa "totalmente y con certeza" cuál es la causa del fallecimiento y "las medidas que se tengan que adoptar".

Así lo ha indicado, a preguntas de los medios, tras una visita a la reforma integral de la Sala de Pediatría del Hospital Clínico de València y mantener una reunión con el equipo directivo. El último balance de la Conselleria de Sanidad revela que hasta la fecha se han detectado 29 casos de intoxicación, en los que se incluyen los tres miembros de la familia: la madre, una mujer de 46 años que falleció en la madrugada del sábado al domingo; el padre y el hijo de 12 que presentaron una evolución buena con recuperación.

Hasta la fecha, la Conselleria ha entrevistado a 75 personas, que comieron en el restaurante en los tres días previos al sábado, entre el 13 y el 16, según ha informado Sanidad. La clínica de todos los casos, excepto en la fallecida, ha sido sintomatología "muy leve", principalmente vómitos y con buena evolución.

Insistida en si puede confirmar si el origen de la infección podría ser unas setas colmenillas, Barceló ha reiterado que sería una "irresponsabilidad establecer el origen" en estos momento, al tiempo que ha reiterado que se desconoce si el fatal desenlace en el caso de la fallecida tiene relación directa con esa ingesta. En esta línea, ha instado a "ser prudentes y esperar a la conclusión de las pruebas".

Preguntada por el proceso administrativo, ha explicado que se ha aplicado el protocolo de Sanidad Pública, que incluye el cierre del local, que ya había sido "inmediatamente" cerrado por la propia empresa, la toma de muestra, la realización del cuestionario a los clientes y a los trabajadores.

Instalaciones perfectas

La consellera no ha descartado que, con los resultados, se puedan abrir otros escenarios y ha subrayado que, en cuanto a instalaciones, el restaurante está "perfecto" y las entrevistas a dos de los siete trabajadores del local no han revelado ninguna irregularidad.

En este caso, a diferencia de otros registrados en la Comunitat, como uno en la provincia de Alicante el pasado verano, "lo trascendente es que ha fallecido una persona" aunque ha hecho hincapié en que "no sabemos si esa persona tenía otra patología, si ha sido por otras complicaciones añadidas al principio de haber tomado unos alimentos que se haya intoxicado".

Hasta que no se sepa el alimento implicado, según ha dicho, "no podemos generar una alarma entre proveedores y restaurantes, sería irresponsable por nuestra parte".

Inspectores de seguridad alimentaria realizaron el pasado 18 de febrero una visita al establecimiento para estudiar sus condiciones --en ese momento estaba sin actividad-- y no detectaron deficiencias relacionadas con factores que hubiesen podido contribuir a la toxiinfección. Asimismo, se recogieron muestras de materias primas y alimentos que formaban parte del menú degustación, muestras que se enviarán al Instituto Nacional de Toxicología para su análisis.