La Audiencia de Palma condenó ayer a un hombre a varias penas de multa que suman más de 2.300 euros por abusar de una menor en la terraza de un bar de la ciudad y agredir a un amigo de esta que salió en su ayuda y por último atacar a un policía nacional al que lanzó una patada cuando iba a ser detenido en 2018.

El acusado, de 51 años, reconoció los hechos ante el tribunal de la sección primera. Se declaró autor de un delito de abusos sexuales, otro de resistencia grave a la autoridad y otros dos delitos leves de lesiones. La sala le impuso 26 meses de multa a razón de tres euros diarios. Además, fijó una indemnización de más de 400 euros para el agente herido y el testigo golpeado. La Audiencia de Palma también le ha prohibido aproximarse y comunicarse con la víctima durante dos años.

Los hechos ocurrieron el pasado 3 de enero de 2018 por la tarde en la terraza de un bar de Palma. El acusado tenía levemente afectadas su facultades por la previa ingesta de bebidas alcohólicas. Por ello, la sala apreció ayer la atenuante de embriaguez.

El hombre se dirigió a una menor de 16 años, se sentó junto a ella, le tocó la mano, le hizo proposiciones sexuales y la manoseó por el muslo y la zona genital por encima de la ropa, hasta que la joven huyó y se refugió dentro del local. El acusado la siguió pero un amigo de la adolescente lo interceptó y recibió un puñetazo en la cara. La Policía acudió para detenerle pero el hombre se resistió y lanzó una patada a un agente.