La Policía Nacional y la Guardia Civil investigan la desaparición del velero de recreo alquilado en Palma que zarpó con tres tripulantes de la ciudad el 5 de enero y del que nadie sabe su paradero, ni sus familiares ni la empresa propietaria del barco, de nombre Dream Land.
Los tripulantes son Álvaro Aguirre, de 67 años, Antonio Fernández, de 66, y Fernando Mogica, de 48, y al parecer son amigos y residentes en Alicante. Debido a la falta de noticias, el pasado día 11 el hijo de Álvaro Aguirre interpuso una denuncia ante la Policía Nacional de Alicante, mientras que la empresa propietaria también formuló otra este pasado jueves ante la Policía Nacional de Palma ya que el velero no ha sido devuelto.
Un portavoz de Salvamento Marítimo de Baleares, organismo dependiente del ministerio de Fomento, señaló ayer que, ante la denominada "ausencia temporal de noticias" de la embarcación, se han rastreado todos los puertos, clubes náuticos, cofradías de pescadores y marinas de España para comprobar si el velero ha arribado a algún puerto, pero por el momento la búsqueda ha sido negativa. Los tripulantes del velero tampoco responden a las llamadas que está realizando Salvamento Marítimo al equipo VHF que lleva instalada la embarcación. Ninguna de estas personas ha empleado el referido equipo para lanzar una llamada de socorro ni se ha activado automáticamente la radio baliza satelitaria que lleva el velero, que habría emitido una señal a cualquier centro de salvamento del mundo en caso de emergencia. En declaraciones a IB3, el hijo de Álvaro Aguirre ha expresado sus quejas por el retraso en la investigación y la búsqueda.
