Los efectivos que trabajan en rescatar a Julen, el niño de dos años que cayó en un pozo de más de 100 metros de profundidad en Totalán, han encontrado las primeras pistas de la presencia del menor en el pozo. Gracias a una cámara que han descolgado por el orificio, han podido descubrir unas chuches del niño. Es el primer indicio de su presencia en el pozo, después de varios intentos infructuosos por localizarlo en la profundidad del pozo, dificultado por su estrechez.

El descubrimiento de las chuches confirma la presencia del niño dentro y da una idea de a qué profundidad se encuentra, después de que durante la tarde de ayer fuera imposible descubrirlo pese a que se descendió la cámara hasta los 80 metros. Al parecer, se baraja que un derrumbamiento pueda haber taponado el pozo, añadiendo una dificultad más para el rescate de Julen. El rescate además, se ha complicado porque se ha producido un derrumbe.

Sin descanso. El dispositivo desplegado ha estado trabajando toda la noche para rescatar al niño que dos años que cayó a un pozo de más de 100 metros de profundidad en Totalán. Todavía no hay novedades y el trabajo sigue con intensidad, ya que la estrechez del pozo dificulta acceder a donde se encuentra el menor.

"Va estar funcionando el tiempo que sea necesario". Así lo ha asegurado el portavoz de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, Bernardo Moltó, quien ha añadido que por ahora "sólo se está trabajando en el pozo original". Los hechos se conocieron sobre las 14.00 horas en una zona cercana al Dolmen del Cerro de la Corona, donde la familia del pequeño ha declarado que estaban dando un paseo por el campo. En un momento dado, el niño se separó y cayó por un agujero, según la versión que ellos mismos han ofrecido a la Guardia Civil. Fuentes cercanas al caso han asegurado a este diario que el padre ha dicho que pudo oír durante unos minutos al pequeño cuando ya había caído en el pozo.

Intentan rescatar a un niño de dos años caído a un pozo en Málaga. Agencia Atlas

Tras dar la voz de alarma, al lugar acudieron efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos y comprobaron que se trataba de un pozo artesiano, una angosta prospección para buscar agua con más de cien metros de fondo y unos 25 centímetros de diámetro. Ante la gravedad de la situación, al operativo se sumaron agentes del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña ( Ereim) de la Guardia Civil de Álora y Granada, el Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Desastres (GIPED) del Colegio de Psicólogos de Andalucía para atender a los familiares del pequeño, sanitarios, empresas privadas que han ofrecido ideas y maquinaria y técnicos del centro coordinador de emergencias del 112 de Málaga. En total hay más de medio centenar de efectivos desplazados.

Hasta ese punto también se ha desplazado un hombre que ha asegurado ser uno de los responsables de Perforaciones Triben, empresa que al parecer realizó la prospección. Ha explicado que el pozo tiene menos de 30 centímetros de diámetro, 110 metros de profundidad y que se realizó hace aproximadamente un mes.

El diputado provincial responsable del Consorcio Provincial de Bomberos, Francisco Delgado Bonilla, ha asegurado a los medios que todo apunta a que la captación de agua no contaba con protección.

Bonilla ha destacado la "complejidad técnica" de la operación y que los efectivos han descendido una cámara que inicialmente alcanzó los 75 metros. Fuentes que trabajan en el operativo han explicado que inicialmente se usó la cámara de un dispositivo móvil junto a cuerdas y linternas con la esperanza de que localizar al pequeño.

Posteriormente, los agentes han optado por bajar una cámara especial propiedad de una empresa de desatoros con la que esperan obtener mejores resultados para conocer el estado del menor. Según fuentes de los servicios de emergencias, el equipo de rescate ha efectuado dos prospecciones y han llegado a unos 80 metros de profundidad sin que hayan podido localizar el paradero del pequeño, por lo que no se descarta que se haya producido un derrumbe en el interior del pozo.

En estos momentos, el equipo de rescate intenta por todos los medios saber con exactitud el lugar exacto donde se encuentra el niño para establecer un plan de rescate que permita sacarlo sano y salvo.