"En cuanto nos han dicho que había fuego, hemos salido corriendo a la calle", resaltaban dos ancianas en bata tras abandonar momentáneamente sus viviendas. Una olla dejada al fuego desató ayer un incendio en la cocina de una vivienda en Camp Redó. Como medida de precaución, una treintena de vecinos fue desalojada temporalmente de sus viviendas. Dos moradores sufrieron una intoxicación leve por inhalar humo.

El incendio ocurrió sobre las doce del mediodía en un inmueble situado en un quinto piso del número 26 de la calle Cotlliure, en el barrio palmesano de Camp Redó. El humo no tardó en extenderse por todo el edificio.

Un dispositivo de emergencia se activó de inmediato en torno al lugar del siniestro. En primera instancia, efectivos de la Unitat d'Intervenció Immediata (UII) de la Policía Local de Palma se adentraron en el inmueble, provistos de equipos de respiración autónoma, hasta la llegada de los bomberos. Las víctimas fueron sacadas al exterior y al resto de vecinos se les instó a abandonar el edificio. Otros agentes cortaron la intersección de la calle Cotlliure con Felip II hasta la llegada de los bomberos.

Cortina de humo

Por su parte, Bombers de Palma desplazaron dos dotaciones a la calle Cotlliure: una autobomba y una autoescalera. Finalmente, esta última no fue necesario utilizarla. Los esfuerzos de los servicios de extinción, una vez que ya estaban sofocadas las llamas por completo, se centraron en disipar la gran cantidad de humo acumulada en el inmueble. Para ello utilizaron potentes ventiladores.

Las asistencias sanitarias del Ib-salut atendieron 'in situ' a los afectados por intoxicación por inhalación de humo de carácter leve. Los facultativos les dieron el alta poco después.

Casi una hora después de que se declarara el incendio, el fuego ya estaba sofocado y la espesa cortina de humo del edificio estaba completamente disipada.

En ese momento se permitió a los vecinos regresar a sus viviendas. No obstante, un afectado solicitó realojo temporal a los servicios sociales municipales.