Un hombre de 37 años, armado con una botella, comenzó a increpar y amenazar con una botella el día de año nuevo a viandantes y a los clientes de un bar del Port de Pollença Posteriormente, arremetió contra agentes de la Policía Local y efectivos de la Guardia Civil. Finalmente, le redujeron y le detuvieron por un presunto delito de atentado a agentes de la autoridad.

Los hechos se iniciaron sobre las 16.45 horas del martes en el Paseo de Anglada Camarasa del Port de Pollença. El sujeto, de origen argentino y residente en el municipio, es conocido por sus numerosos episodios violentos. De hecho, le constan antecedentes por violencia de género, allanamiento de morada y lesiones.

La tarde del primer día de 2019, esgrimió una botella y empezó a amenazar a los transeúntes que acertaron a pasar por dicha calle y a los clientes de un bar de la zona. Tras avisar a la Policía Local de Pollença, varios coches patrullas se personaron en el lugar. El individuo se quitó la camiseta y amenazó con agredir a los agentes.

Los policías locales pidieron apoyo a la Guardia Civil. Varios agentes del Instituto Armado se sumaron al dispositivo. El individuo permanecía en mitad del paseo de Anglada Camarasa, en actitud desafiante, y lanzaba patadas y puñetazos a los efectivos sin llegar a impactar en ninguno. Así permaneció durante una media hora.

En un momento dado, el sujeto se abalanzó sobre un grupo de guardias civiles y estos le redujeron con ayuda de los efectivos de la Policía Local. Finalmente, los agentes del Instituto Armado le detuvieron por un presunto delito de atentado, en el enésimo incidente violento que protagoniza este individuo en el Port de Pollença.