Esta Nochebuena dos jóvenes resultaron heridas en Santa Ponça después de que un coche las arrollara y se diera a la fuga. Para más inri, el vehículo no llevaba la matrícula trasera, lo que dificulta todavía más la localización del desaprensivo que iba al volante. Los hechos ocurrieron sobre las cuatro y media de la madrugada del martes detrás de un centro de ocio de Santa Ponça, en Calvià. Un automóvil pasó por encima de los pies de las dos víctimas. Ambas acabaron en una clínica de Palma. Por fortuna, las lesiones que sufrieron fueron leves. Mientras tanto, el vehículo que las arrolló, que carecía de matrícula trasera, huyó a toda velocidad sin preocuparse por el estado de las dos peatonas.

Ebrio a por el carné

El día de Nochebuena, un hombre de mediana edad bajó la rampa de los juzgados de Vía Alemania, en Palma, dando bandazos. En la puerta de entrada, indicó balbuceando y con grandes problemas para hablar que venía a recoger su carné de conducir. Presentaba síntomas evidentes de que se hallaba bajo los efectos del alcohol. En el juzgado le informaron de que no era posible devolverle el carné y que tendría que regresar otro día. Esa jornada solo estaba operativo el juzgado de guardia. El ciudadano dio medio vuelta y tuvo serios problemas para subir la cuesta hacia la calle, ya que iba de lado a lado.

Agradecimiento a los bombers

La noche del viernes de la semana pasada, casi en vísperas de Navidad, se produjo una gran explosión y un posterior incendio en un ático, en el sexto piso, de un edificio de viviendas en el Coll d'en Rabassa. Un joven morador resultó crítico con quemaduras de segundo grado en el cincuenta por ciento del cuerpo y fue evacuado horas después al hospital de la Vall d'Hebron, en Barcelona. Las paredes medianeras de la vivienda y parte de la fachada volaron por los aires. Luego, las llamas arrasaron todo el inmueble. Entre 60 y 70 vecinos de la finca fueron desalojados. La mayoría de los residentes se mostraron muy agradecidos por la labor de los bomberos, Policía Nacional y Policía Local de Palma. Una vecina que en el momento de la deflagración no se hallaba en casa alabó el gran trabajo de los bomberos. "Cuando toda la gente ya estaba a salvo, los bomberos empezaron a rescatar a todos los animales de la finca. A mí me bajaron el perro. Gracias a ellos, está vivo", dijo la afectada.

Un perro en un pozo

Durante más de dos horas y media, efectivos del Grupo de Montaña, procedentes del parque de Sóller, se tuvieron que emplear a fondo el jueves para rescatar a un perro caído a un pozo, a 20 metros de profundidad en la Serra d'Alfàbia. El dueño del animal, un cazador que se encontraba por la zona, dio la voz de alarma. El incidente ocurrió sobre las 17.10 horas. Los bomberos se tuvieron que descolgar con cuerdas haciendo rappel hasta el lugar donde se encontraba el can, de raza setter. La actuación de los bomberos culminó sobre las 19.45 horas. En ese momento pudieron sacar al perro a la superficie, que se encontraba en buen estado.

Carrera solidaria

La solidaridad no siempre ocurre en Navidad. También comienza en verano. El Club de Muntanya sa Fita, la asociación de vecinos de es Pil·larí y la Fundación La Caixa hicieron entrega de un cheque de 1.500 euros a la asociación Stop Sandhoff. El donativo procede de la VI Cursa Solidaria es Trencadors, que tuvo lugar el pasado mes de julio en es Pil·larí. El objetivo es ayudar a Rodrigo, un.niño mallorquín de diez años, que padece una rara enfermedad neurodegenerativa. En la imagen, Ainhoa, la madre de Rodrigo, Toni Ortiz, subdirector de la sucursal de La Caixa de es Pil·larí, Rodrigo, Torcuato Vílchez, tesorero del Club de Muntanya sa Fita y José Rosales, vicepresidente de la asociación de vecinos de es Pil·larí.