El cadáver hallado el pasado sábado a mediodía por dos pescadores en el pantano de Darnius-Boadella, en el Alt Empordà (Girona), presentaba un fuerte golpe en la parte trasera del cráneo, no llevaba pantalones y por el momento se desconoce su identidad.

Los Mossos d'Esquadra volvieron este domingo a hacer una inspección en la zona del pantano donde se encontró el cuerpo, en la parte más próxima a la localidad de Terrades (Girona), pero no han hallado más indicios.

Según han explicado a Efe fuentes cercanas a la investigación, por los alrededores no han hallado ni el vehículo ni otras propiedades de la víctima, por lo que una de las hipótesis es que le hubieran matado en otro lugar y se hubieran deshecho allí del cadáver.

La víctima, un hombre corpulento, blanco, de entre 40 y 50 años, apareció cerca de la orilla, a un metro de profundidad, con dos grandes piedras de entre 5 y 10 kilos atadas al cuello y a los tobillos.

Vestía una camiseta, ropa interior y zapatillas deportivas, pero no llevaba pantalones, y tampoco se han encontrado por las inmediaciones.

Los investigadores del Área de Investigación Criminal (AIC) intentan averiguar la identidad de la víctima para empezar a investigar el entorno del fallecido.

Los investigadores esperan que la autopsia que practicarán mañana en el Instituto de Medicina Legal de Girona confirme si se trata de un homicidio o si estaba muerta desde hacía unas 24 horas cuando la hallaron, como sospechan.

Como las bases de datos de desaparecidos en principio no han dado resultado, los agentes también intentarán tomar las huellas al fallecido para saber si está en la base de personas fichadas por algún delito.

Se ha hecho cargo del caso el Juzgado de Instrucción número 1 de Figueres.

El pantano Darnius-Boadella, que pertenece al río Muga, está a poco más de 20 kilómetros de Francia y tiene una superficie de 363 hectáreas.

Se trata de una zona muy conocida, en la que hay un Club Náutico y zona de pic-nic y se practica la pesca deportiva, kayak, vela o ski náutico.