La Policía Nacional de Palma ha detenido a dos responsables de una asociación de consumidores de cannabis a los que se considera responsables de un grupo organizado dedicado a la elaboración y tráfico de drogas. En la intervención policial realizada el jueves, los agentes encontraron en la sede de la asociación, ubicada en el polígono de Can Valero, 14,5 kilos de marihuana, 600 gramos de hachís y 2.800 euros.

Según informó ayer la Policía, los agentes del Grupo de Estupefacientes llevaban tiempo siguiendo las actividades de la asociación cannábica "No más guetos", con un local en la calle Poyma, en el polígono de Can Valero de Palma. Los investigadores observaron que había una gran afluencia de personal en el establecimiento, con cerca de 50 clientes en una hora.

Las sospechas se incrementaron al comprobar que los responsables de la asociación, dos ciudadanos españoles, contaban con antecedentes por narcotráfico. Fueron detenidos en 2013 por una plantación de 1.500 plantas de marihuana en un inmueble de Marratxí y en 2017 por una gran cantidad de marihuana y hachís.

Finalmente, el pasado jueves los agentes irrumpieron en el local y encontraron en su interior 14,5 kilos de marihuana y 600 gramos de hachís, de los cuales unos 200 eran de elaboración propia, además de 2.800 euros.

Sistemas de vigilancia

Durante la intervención policial los agentes comprobaron que el establecimiento contaba con un sofisticado sistema de cámaras de seguridad exterior e interior, con vigilancia durante las 24 horas. También controlaban a todas las personas que accedían al local mediante elementos identificativos facilitados por la asociación para acceder de forma exclusiva.

Según la información policial, los miembros del grupo intentaban justificar los ingresos ilegalmente obtenidos por la venta de sustancias estupefacientes como aportaciones por parte de los socios del club de fumadores. La Policía consideró este club una "cortina de humo" tanto para investigadores como para los usuarios, que en muchas ocasiones desconocían las actividades a las que se dedicaban los responsables.

Los investigadores consideran que el cultivo y posterior venta de marihuana y hachís les producía unos beneficios astronómicos, y que posteriormente creaban entramados aparentemente sin ánimo de lucro para blanquear el dinero obtenido.