La Audiencia Provincial de Palma ha absuelto al empresario Antonio Yoh de los delitos de estafa y coacciones en el alquiler de un local comercial, por los que la fiscalía reclamaba cinco años de prisión para él. La acusación sostenía que engañó al denunciante sobre las condiciones del establecimiento, que carecía de suministro eléctrico legal y de licencia de cafetería. El tribunal apunta que en el contrato de arrendamiento estas dos circunstancias no estaban debidamente reflejadas, pero considera que no hubo engaño suficiente para considerarlo una estafa. Yoh recibió 30.000 euros por el arrendamiento de un año y una fianza y el inquilino no pudo abrir al público hasta dos meses después y solo como bar.