Una mallorquina y dos nigerianos aceptaron ayer sendas penas de nueve meses de cárcel por la inscripción fraudulenta de una pareja de hecho para que uno de los africanos regularizara su situación en España. La mujer aceptó a cambio de 5.00 euros.

Los tres acusados -la falsa pareja y un intermediario- admitieron ayer los hechos en un juzgado de lo penal y se declararon autores de un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal.

El origen del caso está en la orden de expulsión dictada en noveimbre de 2014 por la delegación del Gobierno en Balears, que denegó la autorización de residencia de uno de los africanos. El hombre contactó con un compatriota para que le consiguiera un permiso de residencia. Este, a su vez, ofreció 5.000 euros a la mujer mallorquina a cambio de inscribirse como pareja de hecho del afectado por la expulsión.

Así, ambos se empadronaron en el domicilio de ella y se inscribieron como pareja de hecho a finales de 2015. Cumplidos estos trámites, el nigeriano se dio de alta como autónomo y la pareja solicitó en la delegación del Gobierno la tarjeta de residencia de familiar de la Unión Europea. No consta que les fuera concedida.

La fiscalía reclama inicialmente un año de prisión para cada uno de los acusados, pero ayer rebajó su petición tras alcanzar un acuerdo con las defensas.