La jueza ha decretado esta noche prisión provisional sin fianza para Michele Pilato, dueño de Mallorca Investment, y José Antonio Mir Pérez, constructor implicado en la presunta estafa inmobiliaria que la Guardia Civil destapó el pasado miércoles. Los otros dos detenidos, el arquitecto Bruno F. y otro socio del fugitivo Carlos García Roldán, han quedado en libertad sin ninguna medida cautelar.

Los cuatro detenidos, que hoy por la tarde pasaban a disposición judicial, están aparentemente relacionadas con una estafa con la venta de viviendas que podría afectar a dos centenares de personas.

La investigación está bajo secreto judicial.

Se estima que la cuantía de lo estafado a más de 200 afectados supera los tres millones de euros, según fuentes de la investigación.

En la investigación participan agentes de la Guardia Civil de la Policía Judicial, Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Palma, Delincuencia informática y del Servicio Cinológico (unidad canina).

Se investiga la venta fraudulenta sobre plano de viviendas por las que afectados habrían aportado distintas cuantías a modo de señal. Las promociones de viviendas no han llegado a construirse y a los interesados no se les ha devuelto el dinero.