Tres incendios intencionados destruyeron durante la madrugada de ayer ocho contenedores de basura en la barriada palmesana de es Molinar y causaron graves daños en un coche que estaba estacionado junto a los depósitos. La rápida movilización de los Bombers de Palma evitó que los daños fueran mayores. Palma lleva un año sufriendo las actuaciones de un grupo de pirómanos que han arrasado más de 150 contenedores y causado pérdidas superiores a los 120.000 euros.
Los Bombers de Palma se movilizaron sobre las cuatro y cuarto de la madrugada tras recibir avisos sobre un incendio que afectaba a un grupo de contenedores ubicado en la calle Cuba, en es Molinar. Cuando las dotaciones de Bombers y Policía Local acudieron al lugar se encontraron con que los cinco depósitos colocados juntos ya estaban envueltos en llamas, que además habían afectado a la parte delantera de un coche aparcado a su lado.
Mientras los Bombers realizaban las tareas de extinción fueron alertados de que se habían producido otros incendios en depósitos de contenedores ubicados muy cerca de allí, en las calles Quito y Medellín, a apenas 300 metros de distancia.
Los Bombers dejaron uno de sus equipos sofocando las llamas de los depósitos de la calle Cuba, que habían quedado completamente destruidos, y se desplazaron rápidamente a los otros fuegos. La celeridad de su intervención permitió atajar las llamas antes de que arrasaran todos los contenedores.
Finalmente las llamas destruyeron totalmente los cinco contenedores de la calle Cuba, dos más en la calle Quito y uno en la calle Medellín. Un vehículo estacionado en la calle Cuba sufrió serios desperfectos en su parte delantera.
Ayer por la mañana Emaya había respuesto ya todos los contenedores quemados, y las señales del incendio eran apenas visibles, aunque el coche afectado seguía estacionado en el lugar.
Estos incendios se suman a la larga lista de fuegos intencionados en depósitos de basura desde que comenzó 2018. Los siniestros, que se cuentan por decenas, han causado cuantiosos daños materiales en contenedores, vehículos, edificios y mobiliario urbano.
La Policía Nacional mantiene abierta una investigación para aclarar quién está detrás de estos incendios.
