Un incendio forestal afectó en la tarde de ayer a unas trece hectáreas en algunos de los parajes más emblemáticos de Cales de Mallorca, en el término municipal de Manacor. Medios aéreos y terrestres del Institut Balear de la Natura (Ibanat) y dotaciones de Bombers de Mallorca trabajaron para combatir las llamas. El fuerte viento que se registró en la zona complicó sobremanera las tareas de extinción.

El fuego se inició en torno a las 14.15 horas en las inmediaciones del cruce de la carretera de Cales de Mallorca con el camino que conduce a varias calas: Cala Bota, Cala Virgili, Cala Pilota, Cala Magraner, entre otras. Se trata de una zona donde se suelen aparcar los coches. En poco tiempo, las llamas traspasaron la carretera y se dirigieron hacia la depuradora.

Cortina de humo

En un principio, Ibanat declaró el nivel 0. A medida que las llamas cobraron más fuerza, lo elevó a nivel 1 ante las proximidad del fuego a algunos núcleos habitados. El incendio y, sobre todo, una gran cortina de humo fueron perfectamente visibles tanto desde la costa como tierra adentro.

También se movilizaron efectivos de la Policía Nacional, Guardia Civil, Protección Civil y la Policía Local de Manacor y de la Dirección de Emergencias del Govern.

Dentro del dispositivo especial de extinción trabajaron desde el aire para combatir las llamas tres aviones y dos helicópteros del Ibanat. Mientras, a ras de suelo se movilizaron 30 brigadistas en dos autobombas, tres agentes medioambientales y dos técnicos. Bombers de Mallorca, por su parte, desplazaron hasta el lugar del siniestro al parque al completo de Manacor y a dotaciones procedentes de Llucmajor.

Las fuertes rachas de viento que se registraron en la zona complicaron las tareas de extinción. Al cierre de esta edición, el avance del fuego se había frenado, aunque no estaba controlado.