La Policía Nacional ha arrestado esta semana a un hombre de mediana edad por presuntamente obligar a prostituirse a una mujer en su casa en Palma. El sospechoso, acusado inicialmente de un delito contra la libertad sexual y otro relativo a la prostitución, negó ayer los cargos en su declaración judicial.
El magistrado de guardia de Palma acordó que quedara libre. El detenido alegó que la mujer era su inquilina, a la que había alquilado una habitación en su propio domicilio, y, según su versión, ejercía la prostitución libremente porque ella quería.
Sin embargo, la tesis de la víctima es totalmente distinta. La perjudicada le acusó de que él actuaba como un proxeneta y le instaba a prostituirse para conseguir dinero. Cuando su denuncia llegó a los investigadores de la Policía Nacional, los agentes procedieron a detener al hombre. Ayer quedó en libertad tras negar los cargos.
